San Martin Texmelucan, Pue. Este 15 de Marzo la Escuela Secundaria Federal número 1 "Dr. Alfonso Briseño Ríos" cumple 69 años al servicio de la educación, la cual es un ícono en la historia de Texmelucan y ha sido un semillero de formación de miles de estudiantes de la región del Valle de Texmelucan, señalo Jesús Contreras Hernández, Cronista Municipal y Coordinador Regional del Consejo de la Crónica del Estado de Puebla.
Relató que en los años 40 del siglo XX los intelectuales y personas influyentes de San Martín vieron la necesidad de tener más opciones educativas para la juventud de aquella época, pues sólo estudiaban hasta el nivel Primaria. Fue el crecimiento comercial, agrario y la industrialización del municipio, la motivación para extender la preparación académica, y establecer una Escuela Secundaria.
Fue en 1948 a iniciativa del Doctor José María Ovando y del Profesor Melquiades Calixto, como se convocó a los vecinos de Texmelucan a inscribir a sus hijos en el primer y segundo año de la Escuela Secundaria “Motolinía” incorporada a la Secretaría de Educación Pública con Registro N 12, pero al ser una escuela por cooperación mensual, la respuesta fue mínima. Y para 1951 la iniciativa la siguieron los profesores Arturo M. Arruti Muñoz, Agustín Carrasco Martínez, los doctores Alfonso Briseño Ríos y Enriqueta González de Briseño, junto con el Profesor Enrique Zamora Palafox, quienes reiniciaron el proyecto de una Escuela Secundaria para Texmelucan.
Ellos hicieron las gestiones para incorporar la escuela a la SEP, acompañándose de 50 firmas de comerciantes, campesinos y empresarios que dieron su apoyo para la puesta en marcha. Como toda escuela naciente, anduvo en peregrinación por casas particulares y bodegas. Y para el 29 de marzo de 1951 se anunció que la secundaria comenzaría labores en el edificio de la Escuela Primaria “Benito Juárez”. Al principio se sostenía con las cuotas de los padres de los alumnos; los grados escolares, que ofrecía eran el 1° y 2°. Para solventar sus primeros gastos de operación sus directivos acudieron al ayuntamiento, logrando que en Sesión de Cabildo el 24 de mayo de 1951, le cedieran el subsidio de $100.00 mensuales a la recién nombrada Escuela Secundaria “Maximino Ávila Camacho.
Posteriormente el plantel educativo se ubicó en el patio del Ferrocarril Interoceánico, pero fue el presidente municipal Heriberto Génis quien mandó hacer una explanada o patio, luego unos jacalones y finalmente unos salones que eran para una escuela primaria; pero accedió cederlos a la secundaria. La propiedad fue adquirida hasta el bienio del 2009-2010, cuando Ferrocarriles Nacionales de México, vendió sus predios a empresas particulares y estas tuvieron a bien donar a la ciudad los espacios ocupados para la educación.
En octubre de 1953 con motivo de la Carrera Panamericana que se corría sobre la Avenida Libertad Sur (Carretera Federal México-Puebla) y pasaba junto al plantel, se aprovechó para solicitar ayuda económica para construir la cancha de basquetbol. Luego el Club de Leones Independencia colaboró con la edificación de salones. El Presidente Municipal Alfredo del Regil anunciaba el 3 de mayo de 1956 que con ayuda del Gobernador se construía un salón y los sanitarios. Para 1957 se le introdujo el agua potable y el drenaje.
En 1965 el crecimiento de la matrícula escolar y de la plantilla de profesores, obligó a su Director, el Profesor Abel Vargas Villa solicitar la anexión de predios contiguos, para ensanchar la construcción. En 1966 la construcción del edificio de la secundaria era una realidad que apoyaba la SEP Federal. Para 1970 su denominación y clave eran “Escuela Secundaria Federal Diurna”, Clave E.S. 347-10.
Finalmente Jesús Contreras Hernández agregó que en 1971 el Departamento de Nomenclatura de la SEP revaloró el nombre de la escuela y pidió a una comisión la propuesta de una terna con nombres de Texmeluquenses, distinguidos por sus aportaciones a la educación, la ciencia y la cultura. Fue así, que la Escuela Secundaria “Dr. Alfonso Briseño Ríos” adquirió su nombre vigente; en honor de un Médico Homeópata, filántropo, profesor de las ciencias naturales y las sociales en la misma institución que lleva su nombre, respetado y admirado.