En espera de un subsidio para subsanar las pérdidas que registraron sus cultivos por la caída de granizo el pasado 1 de mayo, se encuentran agricultores de este municipio y la región.
De acuerdo con el testimonio de los campesinos, en las parcelas de las comunidades de Pino Suárez, Tecolco y San Antonio La Portilla, en Tecamachalco, se registró mayores daños ante la concentración de la caída de granizo al tamaño de una canica que perduró por más de media hora.
Motivo por el cual sus cultivos de maíz, frijol, alfalfa, avena y trigo principalmente resultaron afectados, ya que el hielo debilitó tu crecimiento y a su vez rompió sus hojas y tallo de la planta, lo que refleja pérdidas, ya que en algunos tramos tendrá que volver a resembrar para obtener cosechas a fin de año.
Don Gelacio, vecino de Pino Suárez, indicó que las parcelas de su padre se vieron afectadas en un 30 por ciento, porque el granizo lastimó hasta la corteza de la milpa, motivo por el cual se espera reciban una compensación por parte de las autoridades para subsanar las pérdidas de su cultivo de maíz, debido a que reflejará pérdidas en su bolsillo.
Ante esta situación, la titular de la Secretaría de Desarrollo Rural, Ana Laura Altamirano Pérez, dio a conocer que tras una inspección de daños realizada en la región se calcula que son alrededor de 200 hectáreas entre hortalizas, legumbres, maíz y frijol que resultaron afectadas.
Lo anterior, en ejidos de Tecamachalco, Acatzingo, Quecholac y Los Reyes de Juárez, en estos últimos tres municipios con mayor presencia de cultivos de hortalizas y legumbres que también resultaron con daños en su floración, los cuales son irreversibles a espera de que las condiciones climatológicas ayuden a mejorar los cultivos.
Lo que reflejará menor costo en el mercado, ya que la plata se encuentra maltratada y por tanto es difícil que se comercialice a buen precio, no obstante, los productores no pierden la esperanza de vender su producto a un costo cordial para volver a invertir.
Cabe mencionar que en algunas parcelas resultaron pérdidas totales, ya que el límite de agua de lluvia sobrepasó el tamaño del cultivo y este se pudrió por exceso de agua, por tanto, los campesinos y agricultores esperan que la ayuda llegue pronto para volver a cultivar, ya que es el único sustento para sus familias.
Al respecto, Luis Ángel Méndez, ingeniero en agricultura, calcula que la inversión por hectárea de maíz es aproximadamente ocho mil pesos, lo que involucra labrar la tierra con tractor, siembra y compra de la semilla, mientras en legumbres es de más de 25 mil pesos por la adquisición de almácigo, agua de riego y mano de obra.
