Izúcar de Matamoros.- Zafarrancho se reportó entre elementos de Seguridad Pública Municipal de Izúcar de Matamoros y habitante de la colonia Rancho Juanitos, quienes se niegan a que la obra de la construcción de un nuevo panteón municipal en esta zona se lleve a cabo, lo que provocó patrullas dañadas y el desalojo de los elementos.
Fue durante la mañana de este jueves que al menos cincuenta habitantes negaron el ingreso a un equipo de trabajo legalizado para dar inicio con los protocolos de su proceso de construcción. Los quejosos informaron que ese terreno es de la colonia y no se entregará a nadie, pese a que el mismo exgobernador habría ya donado ese espacio y designado como nuevo panteón.
Esto derivó un enfrentamiento entre los oficiales y los habitantes quienes empezaron a lanzar piedras para exigir a los elementos que se retiraran del lugar. “Hubo necesidad de un gran equipo de elementos porque los habitantes empezaron a gritar y pedir auxilio” declaró un elemento policiaco.
Cerca del mediodía, arribó la alcaldesa Irene Olea Torres quien entró en diálogo con los quejoso, les recordó que en agosto de 2022, se anunció la construcción de un nuevo panteón y la reserva ecológica en dicha zona, abarcando un predio de 7.5 hectáreas donado por el entonces gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.
Detalló que el actual panteón municipal ubicado en el barrio de Santa Cruz Tecoxco, estaba completamente saturado al igual que los panteones de otras comunidades como de Matzaco y Raboso, por lo que era necesario de uno nuevo.
Agregó que de las 7.5 hectáreas, sólo 2.5 hectáreas se destinarían para la construcción de un nuevo panteón municipal, y el resto sería una zona de reserva ecológica, que cubrirá una necesidad de espacios verdes en lo que sería un parque urbano.
Pese a lo explicado, los vecinos se continúan negando a este proyecto, pues comentan que todas esas hectáreas ya están repartidas, pero sin ningún sustento legal. Por lo que la alcaldesa pidió una segunda cita para que finalmente se haga las denuncias correspondientes y que sea el gobierno del estado que deslinde responsabilidades.