Figuras irregulares quedaron marcadas en un campo de cebada, ubicado entre los municipios de Huejotzingo y Juan C. Bonilla, donde vecinos aseguran haber escuchado ruidos extraños por la noche, aunque esta versión es rechazada por el propietario del predio.
El dueño del sembradío aseguró que fue un ventarrón y la lluvia registrada el domingo lo que originó que la cebada se inclinara; mientras que los vecinos señalan que no huno viento, y que se escucharon ruidos en la noche y que al día siguiente ya estaban las figuras formadas.
A raíz del reporte, este miércoles arribó personal de Protección Civil estatal al terreno de cultivo perteneciente al municipio de Huejotzingo, pero a unos kilómetros del socavón de Santa María Zacatepec, donde realizaron un sobrevuelo con dron para evaluar lo que está pasando y los motivos por los cuales se registró dicho fenómeno.
En el sitio, quien dijo ser el dueño del terreno pidió a las personas del área de Prevención y Desastres a que desmientan las versiones de que es algo anormal o sobre natural, porque no quiere a “gente chismosa” en su terreno.
Así mismo, pidió que el gobierno del estado lo indemnice porque fue la lluvia y un ventarrón, lo que provocó que se cayera su cultivo.
Mientras tanto, vecinos de la zona, comentaron que, durante la noche del domingo, se escucharon ruidos extraños, ni los perros ladraron.
Agregaron que al día siguiente notaron como la cebada estaba inclinada en ciertos lugares del terreno y que desde las alturas se observaban figuras.
“Si hubiera sido un ventarrón se hubiera llevado las láminas de mi casa, mire, esas laminas se vuelan a cada momento”, dijo una vecina.
Otro vecino precisó que es común escuchar sonidos raros en la zona, no quieren hacerlos públicos por temor “a que nos tomen como gente loca”. Incluso señaló que ese tipo de ruidos que escucharon ya los habían escuchado en los días en que estuvo creciendo el socavón en Zacatepec.
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