“Lo intenté, tal vez la próxima vez ya no viva”, hombre de 93 años se queda sin votar en Cuetzalan

Don Miguel solo pedía hacer uso de su derecho

Pilar Pérez

  · lunes 2 de julio de 2018

Foto: Pilar Pérez

Se dio por vencido. Don Miguel Bautista Martín, de 93 años de edad, no pudo votar ayer a pesar de que recorrió a pie amplias distancias para solicitar en tres casillas que le permitieran hacer válido su derecho, sin embargo, en todas ellas lo rechazaron y con tristeza tuvo que volver a su casa. Tal vez esta habría sido su última elección presidencial.

Nació en la comunidad de Tepetzintan, pero toda su vida, como policía municipal, la dedicó al centro histórico de Cuetzalan y ayer nadie reconoció eso. Pasado el mediodía llegó a las casillas ubicadas a un costado del Palacio Municipal de la sección 0347 donde, incluso en náhuatl, discutió con un capacitador del Instituto Nacional Electoral (INE), quien trató de explicarle que no le correspondía votar ahí, pero Don Miguel rechazó la información.

Con enfado se dirigió a la Casa de la Cultura, ubicado a unas tres cuadras del zócalo, ahí los funcionarios de casilla parecieron tener más paciencia y él también fue más tolerante, sin embargo, hubo una confusión y lo enviaron a otra casilla de la sección 0362, a unas 10 cuadras del lugar.

Decidido a votar porque, dijo, esta es la única forma en la que un ciudadano puede criticar a sus gobernantes y también pedir apoyo, por ello caminó varias calles perpendiculares y subió al menos 30 escalones de piedra para dirigirse a la otra sección, donde recibió la misma respuesta de los funcionarios de casilla: aquí no puede votar, tiene que acudir a su comunidad.

El rostro de don Miguel entristeció en cuanto escuchó la negativa por tercera vez, por sus ojos brotaron un par de lágrimas, pero no se daba por vencido, quería que alguien le diera un documento en el que le autorizaran, este lunes, viajar a su comunidad o a Zacapoaxtla, donde había una casilla especial.

Foto: Pilar Pérez

No, la respuesta siempre fue no, por lo que tomó su bastón y guardó su credencial en el bolso superior izquierdo de su camisa, dio un respiro y dijo: “bueno, pues lo intenté, tal vez la próxima vez ya no viva”, y retomó el camino, alejándose de la casilla, según anunció, a su hogar.

La edad, los problemas económicos y la falta de una casilla especial en el municipio de Cuetzalan impidieron a este ciudadano participar en el proceso electoral y cabe destacar que no fue por falta de interés sino porque no tuvo oportunidad de ello.