Proyecto de la Minera Gorrión está detenido, afirma alcalde

El funcionario municipal señala que la el Gobierno Federal será quien apruebe la iniciativa

Alba Espejel

  · miércoles 28 de agosto de 2019

El alcalde de Ixtacamaxtitlán, Víctor Herrera Pozos, aseguró que el proyecto de la Minera Gorrión está detenido y que hasta el momento el municipio no ha otorgado ningún permiso para su instalación. En su opinión, la extracción de oro y plata es decisión de la Federación no de la Ciudad o el Estado.

“Ahorita el tema está detenido, no se ha escuchado alguna versión de alguna corriente, confío en que haya paz social, así como gobernabilidad en el municipio. Es una cuestión de nivel federal y en su momento quien va a definir si camina o no camina, es el Gobierno federal”, comentó.

Pese a que, en su toma de protesta, el acalde priista, dijo que estaría en contra de los proyectos de muerte, en esta ocasión señaló que el municipio no puede hacer nada para detener la mina, y sólo le queda esperar si el Gobierno Federal, puntualmente la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales aprueba el proyecto. “Creo que es cuestión de tiempo, es un aspecto importante pero más que nada debo seguir la normatividad”, agregó.

Al mencionarle que los pobladores acusan de contaminación, daño ambiental y que los ciudadanos han mencionado que se han enfermado desde que llegó la Minera Gorrión SA de CV, dijo que desconoce estos casos y que ese tema no es de su competencia, sino de la Secretaría de Medio Ambiente. “Yo no veo procesos que se estén realizando, no lo creo así, su servidor está en un proceso de ni favor en contra de la Minera, la autoridad federal será que determine si se lleva a cabo o no”, dijo.

El Sol de Puebla ya habíaa publicado que, el anuncio de la apertura de la mina en el municipio de Ixtacamaxtitlán por parte de las filiales de la empresa canadiense Almaden Minerals reavivó el conflicto social que ha generado este proyecto minero entre la población y la minera por el acceso al agua y la defensa del medio ambiente.

Lo anterior sin omitir la batalla legal que ha librado la comunidad indígena náhuatl, misma que aún queda por resolverse y que ha mantenido este proyecto pausado por 4 años.