Habitantes de este municipio continúan en total descontento ante la ola de contaminación ejercida por parte de la misma autoridad municipal, encabezada por Edgar Murrieta Navarro, quien continúa con la quema indiscriminada de residuos sólidos dentro del basurero “El Zapotal”, generando, a su vez, una nube de humo que cubre gran parte de las comunidades, cuyos pobladores se ven obligados a respirar las sustancias emanadas.
Cabe destacar que fue durante el mes de diciembre de 2017 cuando dichos pobladores comenzaron a expresar sus inconformidades en contra del entonces alcalde, Julio César Cabañas Méndez, puesto que, durante cerca de cuatro años de su gobierno, no habría implementado algún tipo de estrategia para depositar dichos residuos; proponiendo la creación de un relleno sanitario, cuya petición no fue atendida.
Entre los puntos afectados se encuentran las colonias El Zapotal, Roberto Esperón, Lomas del Mirador, entre otras, como el centro del municipio, misma población que durante los días de quema de basura se ve envuelta en una cortina de humo y malos olores que llegan hasta el interior de sus hogares, lo cual ha generado intoxicaciones y hasta enfermedades respiratorias, sobre todo en los niños y personas adultas.
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Ante ello, hacen un llamado a Diego Torres, actual regidor de Limpia Pública, a quien exhortan a llevar a cabo un análisis de esta situación para, a la brevedad, considerar la creación de un relleno sanitario, en el cual depositar la basura de manera adecuada, dejando de lado este tipo que quemas, que contaminan el medio ambiente de la zona. Además, de acuerdo a la dirección del viento, el humo afecta a gran parte de la población.
En este sentido, según dieron a conocer, esperaban que con la llegada de esta nueva autoridad municipal dichas acciones fueran erradicadas, considerando la necesidad de que este gobierno municipal tome en cuenta dicha petición como una prioridad que debe ser atendida y no dejada en el olvido, tal y como han hecho otros gobiernos.
Y es que, hasta el momento, la humareda genera problemas de salud tales como dolor de garganta, ardor en los ojos y picor en la nariz, acentuándose aún más en los niños pequeños, quienes continuamente deben ser llevados al médico ante este tipo de incidencias.
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Finalmente, reclamaron que esta problemática no haya sido atendida por las instancias dedicadas al cuidado del medio ambiente, pese a las peticiones que, de manera concreta, se hicieron ante la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a fin de, al menos, hacer un llamado de atención al Ayuntamiento, con el propósito de evitar que este tipo de incendios se sigan realizando de manera esporádica.