La repartición de los troncos de árboles derribados por el Ayuntamiento y la Junta Auxiliar de Cuautlita, causó diferencias entre los pobladores de la misma comunidad, además de que, las autoridades de ambos rangos aceptaron que se derribaron más de los necesarios.
En medio de una acalorada discusión entre el presidente auxiliar, Benito Cortés y el director de Obras Públicas del Ayuntamiento, sobre el derribo de los árboles y el aprovechamiento de la madera, aparecieron terceros en el debate, algunos ciudadanos que se inconformaron tanto en la repartición de los maderos como por haber talado varios árboles, incluso más de los que era necesario.
Por un lado, Benito Cortés externó su inconformidad por la tala que inició la comuna en dos hectáreas, un total de 30 árboles, en cambio, la autoridad comunera admitió que él también derribó árboles, indicando que “estos iban a estorbar para el cercado perimetral” del nuevo panteón Municipal que está en habilitación en la Junta Auxiliar de Cuautlita.
Benito Cortés admitió que el Ayuntamiento otorgó el aprovechamiento de la madera para las personas de la colonia de damnificados “Plácido Domingo”, pero algunos vecinos dijeron que los macizos se entregaron apersonas que no debieron recibir ese beneficio, porque en lugar de hacer alguna ampliación para su vivienda, “la vendieron”, otros señalaron al presidente auxiliar de hacer negocio con parte de los árboles. Él lo negó.
Al final de la discusión aseguraron que se talaron más árboles de lo previsto y también aseguraron que hubo gente que se aprovechó de los hechos para derribar más árboles, algunos con el argumento de que, su tamaño “ya era un riesgo para algunas viviendas cercanas a éstos”.
Al final, casi todos los que se señalaron entre sí por la tala de árboles y beneficiarios de los mismos, terminaron tomando refresco juntos y hasta compartiendo algunos pollos en chiletpín, encacahuatados y hawaianos, todos cocinados a la leña; bajo el techo de las nuevas instalaciones de la Presidencia Auxiliar.