El propietario de un perro de la raza pitbull que mordió en 2015 a un menor de 5 años de edad, fue detenido hasta la noche del lunes pasado en San Martín Texmelucan, a fin de que se haga responsable por el daño causado al pequeño que en su momento tuvo que ser hospitalizado.
En el 2015, Néstor R. M. de 23 años de edad, salió con dos perros al centro de la ciudad de San Martín Texmelucan, sin embargo, cuando paseaba por el zócalo perdió el control de uno de ellos, el cual se abalanzó contra un niño que se encontraba en el sitio.
El menor resultó con lesiones graves en sus brazos y cuerpo, sin que el propietario del can se hiciera responsable de las lesiones provocadas al menor. Derivado de esto, los padres del afectado levantaron la denuncia ante las autoridades correspondientes.
Fue hasta tres años después que una vez con la orden de aprehensión girada por el juez, los agentes de investigación de la Fiscalía General del Estado, procedieron a su ejecución.
De esta forma, Néstor R.M. fue trasladado al Centro de Reintegración Social de Huejotzingo, donde deberá de responder por las acciones que le fueron imputadas, al ser el propietario del perro agresor.
PRESUNTO LEVANTÓN
La ejecución de la orden de aprehensión realizada en la Unidad Habitacional San Damián provocó que en redes sociales difundieran mensajes que alertaban sobre el supuesto “levantón” de un vecino de la unidad, cometido por gente armada que se lo había llevado a bordo de una camioneta.
Los hechos se registraron alrededor de las diez de la noche frente a los edificios de la Unidad Habitacional Antonio Hernández, de la misma colonia San Damián, por lo que pudo ser observado por vecinos de la zona.
Inmediatamente, una fotografía de los vecinos reunidos en la calle fue enviada a través de redes sociales, la cual se compartió entre grupos de WhatsApp y Facebook, debido a que la gente estaba anonada de lo que había visto.
Lo anterior, luego de que el temor ha crecido entre los ciudadanos de San Martín Texmelucan ante los últimos acontecimientos delictivos que se han registrado en la región.
Fue hasta la mañana de ayer cuando fuentes ministeriales confirmaron a El Sol de Puebla que lo ocurrido la noche del 12 de marzo se trató de la ejecución de la orden de aprehensión girada por un juez en contra del propietario de “perros de pelea”, debido a que uno de ellos había agredido a un menor de edad tres años atrás.
