René Granado Hernández, miembro de la mesa directiva de la Unidad Habitacional San Damián, precisó su preocupación por la instalación del Paradero Norte, pues representa un riesgo para los vecinos y también para la ciudadanía en general.
En este sentido, precisó que el paradero que se va a instalar "representa un riesgo para los habitantes de esta unidad, por el simple hecho de que utilizarán la avenida Luis N. Morones y con ello aumenta la inseguridad".
Hasta el momento, las autoridades municipales no les han notificado el proyecto, el cual consideró que solo es un proyecto personal de Arnulfo Galindo y la alcaldesa Norma Layón, pues no ve beneficios para la ciudadanía texmeluquense.
Volvió a reiterar René Granado que solo es aumentar el riesgo para los habitantes, pues recordó el lamentablemente accidente en la que explotó el ducto de Pemex en diciembre del 2010 y dejó más de 30 personas muertas y varias heridas, así como daños materiales en la zona donde estará ubicado el Paradero Norte.