TEHUACÁN, Pue.-Una mujer acusada de ser asaltante, fue retenida por segunda ocasión por sus vecinos, luego de que regresara como si nada a su domicilio acompañada de su pareja, quien también participó en el atraco a un taxista el pasado domingo en la colonia Guadalupe, perteneciente al municipio de Tehuacán.
Esta vez, la mujer fue maniatada con cinta canela mientras los colonos amagaban con golpearla y así darle un escarmiento. Por su parte, su pareja sentimental, al ver a la gente enardecida huyó de la zona dejando a su suerte a la fémina.
Todo empezó el pasado domingo, cuando Gisela N., de 23 años de edad, originaria del Estado de México, fue retenida junto con otros dos hombres, quienes solicitaron un servicio de taxi en la colonia Guadalupe; sin embargo, el trío de presuntos delincuentes sometieron al conductor con un arma de fuego para robarle sus pertenencias. No obstante, apoyado por sus compañeros taxistas y vecinos del lugar, lograron ubicarlos y retenerlos en un domicilio.
Cansados de los contantes robos en la zona, el grupo de vecinos sacaron a golpes a los acusados de la vivienda. Elementos de seguridad pública intervinieron para rescatar a los tres presuntos delincuentes y trasladarlos a la Dirección de Seguridad Pública, en donde esperaron que el chofer del taxi acudiera a poner la denuncia correspondiente, pero este nunca llegó, por lo que los dos hombres y la mujer fueron dejados en libertad al no haber parte acusadora.
Fue la tarde de ayer, que dicha fémina llegó a su domicilio como si no hubiera pasado nada, acompañada de su pareja. Los vecinos dieron el aviso de que habían regresado dos de los tres retenidos el domingo anterior, por lo que se juntó un grupo de gente para enfrentarlos y exigirles que se fueran a vivir a otro lugar.
Para ello, los vecinos irrumpieron de nueva cuenta en la propiedad donde renta la pareja; el hombre huyó, pero la mujer no corrió con la misma suerte; fue retenida por segunda ocasión y maniatada con cinta canela para luego exhibirla en el lugar.
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Mediante una llamada fue alertada la policía, por lo que al sitio arribaron uniformados municipales, quienes dialogaron con los inconformes y llegaron a un acuerdo para llevarse a la mujer y prácticamente rescatarla por segunda ocasión.
Los mismos vecinos reclamaron a los agentes la nula presencia de la policía en dicha colonia, pues aseguraron que ellos mismos son quienes se cuidan de los delincuentes que llegan a habitar en zona de la ciudad, por lo que se acordó con los cuerpos policiacos, mantener un patrullaje constante y llevar a cabo una reunión vecinal.
Tras varios minutos de reclamos y de compromisos, los inconformes accedieron a que se llevaran a la mujer, cuyas pertenencias quedaron regadas en la calle.
La fémina fue advertida de que si vuelve a regresar ella o su marido a dicho inmueble, ya no llamaran a la policía, pues en esta ocasión si van a lincharlos, pues para ellos fue una burla el haber regresado después de que los propios colonos amagaran con lincharlos tras el asalto al taxista.
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