Aunque la Secretaría de Infraestructura, Movilidad y Transportes (SIMT) instruyó revisar las tarifas del transporte público en Zacatlán, donde usuarios reportaron incrementos de hasta el 50 por ciento en algunas rutas, usuarios reportan que se sigue aplicando esa alza en los costos del transporte y no han visto que esa dependencia esté haciendo algún operativo de revisión en Zacatlán.
"Aunque ya tiene varios días este incremento, hoy la gente sigue protestando, si es verdad lo que dicen los concesionarios que publiquen el decreto de autoriza este incremento", exigieron los entrevistados.
Y aunque el subsecretario de transportes, Alberto Vivas Arroyo, solicitó comprobar investigar tales versiones, la población sigue padeciendo el incremento en algunas rutas, por ejemplo las que van de México-Zacatlán, que incluso en el servicio económico que antes costaba poco más de 140 pesos, hoy cuesta 150; el que antes costaba poco más de 240, el servicio activo, hoy cuesta poco más de 250. El de Puebla continúa con la tarifa alzada de 148, poco más de 10 pesos más. Los más discretos fueron los de la línea "Amado Camarillo", que solo subieron entre uno y dos pesos el pasaje.
La más criticada es la línea que va de Zacatlán a Chignahuapan, en el servicio que no es directo, que siguen cobrando 9.50 pesos: "Los choferes se siguen molestando porque les exigimos que nos muestren el decreto que autoriza estos incrementos, dicen que no nos lo pueden mostrar porque entonces los multan; esta mañana he ido dos veces a Chignahuapan, por asuntos del trabajo y para llevar a los niños a la escuela y no he visto a nadie de esa Secretaría investigando el tema", dijeron a pregunta expresa de este reportero.
Otra de las fuentes señaló que siguen los enconos entre los usuarios y los choferes, a tal punto que cada vez son más groseros: "estas la última vez que te cobro seis pesos", vociferó el chofer a uno de sus usuarios, en tono prepotente, según su testimonio.
Una de las líneas que ha respetado el precio actual en la ruta que cubre del centro de la ciudad hacia la central camionera, que sigue respetando el costo del pasaje de seis pesos. "De aquí a que la Secretaría investigue y compruebe las versiones para tomar medidas ya se les acabó la administración o tendrán más motivos para pedir su mordida", ironizó otra de las fuentes consultadas.