/ martes 22 de noviembre de 2022

Guacamaya Leaks: 15 grupos delictivos pelean por huachicol en Puebla

Entre 2019 y 2020 las autoridades detectaron una decena y media de bandas dedicadas al robo de hidrocarburos en Puebla

La disputa por el control del huachicol en el estado de Puebla es protagonizada por 15 grupos delictivos, los cuales mantienen sus estructuras vigentes en 18 municipios, principalmente al interior del llamado Triángulo Rojo y en la zona metropolitana de la capital poblana.

En una serie de reportes de inteligencia criminal elaborados por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), en coordinación con autoridades estatales y municipales, y extraídos por el grupo de activistas informáticos Guacamaya, se documentó que entre 2019 y 2020 las autoridades detectaron una decena y media de bandas dedicadas al robo de hidrocarburos en la entidad.

Dicha documentación, que se encuentra en poder de esta casa editorial, refiere que aunque han sido capturados los líderes de, por lo menos, cinco agrupaciones, su vigencia en cuanto al hurto de combustibles se mantiene en diversas demarcaciones poblanas, lo que implica que no todas ellas han sido desmanteladas por completo.

¿Qué bandas delincuenciales pelean por huachicoleo en zona metropolitana de Puebla capital?

Tan sólo en los municipios que abarca la mayor zona metropolitana del estado, Amozoc, Coronango, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, San Salvador el Verde y la propia ciudad de Puebla, la Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones como blancos generadores de violencia en cuanto al robo de combustibles.

Tan sólo este territorio alberga 2 millones 114 mil 913 habitantes, es decir, el 32 por ciento de la población total del estado. Según el reporte elaborado por la Sedena y la SSPC, la cobertura criminal en diversos puntos de esta delimitación territorial es peleada por 10 bandas: Los Cuijes, Los Tarzanes, Los Pelones, Los Oaxacos, Los Villegas, Los Othones, Los Marranos y las células delictivas de El Loco Téllez, El Bukanas y La Loba.

La Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones como blancos generadores de violencia en cuanto al robo de combustibles. Foto: Archivo | El Sol de Puebla


Los Cuijes

La primera de ellas cobró notoriedad en 2017, pues sus integrantes fueron los autores materiales de la masacre ocurrida en el municipio de Huehuetlán el Grande, en la cual fueron asesinadas nueve personas.

De acuerdo con reportes periodísticos, el sanguinario episodio fue producto de una confrontación entre la banda de Los Cuijes y otros grupos dedicados al huachicol en la región central de la entidad poblana.

Según expuso la Fiscalía General del Estado (FGE) en ese entonces, los ataques duraron alrededor de 12 horas y, según determinaron las investigaciones, cuatro personas fueron asesinadas en ese municipio, mientras que otras cinco más fueron liquidadas en otro sitio desconocido y sus cuerpos fueron calcinados y arrojados en un predio de la junta auxiliar de Santo Tomás Chautla, en Puebla capital.

La autoridad ministerial logró la detención de nueve personas pertenecientes a dicha banda, sin embargo, sólo seis de ellas fueron vinculadas a proceso. Inclusive, una de ellas fue un menor de 16 años de edad.

Un año después, a consecuencia a un operativo efectuado por la Secretaría de Marina (Semar) y la Sedena para contrarrestar el robo de hidrocarburos en el estado, se confirmó la muerte a balazos de siete sujetos pertenecientes a la banda de Los Cuijes, entre ellos uno de sus líderes, El Comandante 30. Todos ellos estaban vinculados a la masacre de 2017.

Los Tarzanes

Respecto al segundo grupo ubicado por la inteligencia militar, Los Tarzanes, pese a que su líder, José Benito N, fue detenido por la Procuraduría General de la República (PGR) en 2018 por su responsabilidad en una fuga de gas LP ocurrida en la colonia Villa Frontera, los alcances criminales de sus integrantes se mantienen vigentes todavía.

Aunado al robo de combustibles, según reportes periodísticos, dicha agrupación está ligada al comercio de enervantes, extorsión y asesinatos en las colonias Villa Frontera, Villa Escondida y Jorge Murad Macluf, de la capital poblana.

Pemex documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) durante abril de 2021 hasta abril de 2022. Foto: Archivo | El Sol de Puebla

Los Pelones

La tercera agrupación que domina el huachicol en la capital poblana es la de Los Pelones. Aunque su líder, Gustavo N, fue detenido a sus 26 años de edad, por ser el autor material del robo a un camión cargado de cartón en 2019, y reaprehendido en 2021 por el delito de posesión ilegal de armas, evasión de una detención e intento de soborno a elementos de la Policía Estatal, la actividad criminal de Los Pelones fue considerada como un factor de riesgo a la seguridad pública por la SSPC y la Sedena.

Los Oaxacos

La siguiente organización delictiva presente en la región es la de Los Oaxacos. Su cabecilla, Rubén Darío N, fue detenido en junio de 2019 poco después de que asaltó, junto con miembros de la banda “Los Goyos”, diversos camiones en la Sierra Nororiental de Puebla. Pese a ello, en la actualidad se mantienen imperantes en la venta ilegal de combustibles.

Cabe mencionar que, según la SSPC y la Sedena, las cuatro agrupaciones enlistadas previamente tienen presencia en los municipios de Puebla, Quecholac y San Baltazar Temaxcalac.

Aunado a ellas, la célula de Lidia N, alias La Loba, opera también en la capital del estado, donde, además, se le ha asociado con el robo a ciudadanos. Aunque fue detenida en septiembre pasado, fue dejada en libertad en días siguientes.

Sin embargo, posterior a ello, autoridades ministeriales poblanas catearon diversos inmuebles de la colonia Solidaridad, donde presuntamente vivía junto a su familia, sin embargo, no dieron con su paradero.

Célula de Óscar N, alias El Loco Téllez, mantiene posición en San Martín Texmelucan

Por su parte, las bandas que comparten la plaza de huachicol en los municipios metropolitanos de San Martín Texmelucan y San Salvador El Verde, pero también en San Matías Tlalancaleca y San Miguel Xoxtla, son las de El Loco Téllez, Los Marranos y Los Othones.

Al igual que en casos ya mencionados, el líder del primer grupo, Óscar N, alias El Loco Téllez, fue encarcelado el año pasado luego de que la FGE logró su vinculación a proceso por el delito de homicidio calificado. La sentencia que le imputó un juez estatal fue de 23 años 9 meses, además de una serie de reparaciones económicas a las víctimas que dañó.

Esto ocurrió después de que meses atrás ya había sido aprehendido y después liberado por autoridades del estado de Tlaxcala, por los ilícitos de asesinato y secuestro.

De acuerdo con reportes periodísticos, después de su encarcelamiento, el control del robo de combustibles en San Martín Texmelucan pudo haberse conferido a familiares y amigos de Óscar N. Esto podría justificar la razón por la cual el Ejército Mexicano consideró a su banda como una de las precursoras de este delito en la región metropolitana.

Los Marranos

Respecto a la siguiente banda, la de Los Marranos, lo último que se sabe es que mantienen control sobre diversas autoridades de los territorios que comprenden el llamado Triángulo Rojo. Asimismo, según reportaron medios de comunicación nacionales, este grupo estaría vinculado con el Cártel de Los Beltrán Leyva.

Por su parte, de Los Othones se tiene conocimiento que tiene sus orígenes en el estado de Oaxaca y sus alcances se extienden también hacia Veracruz.

Atañe a Huejotzingo y Esperanza banda de El Bukanas

Ya en el municipio de Huejotzingo, pero también en Esperanza, las autoridades federales posicionaron a Roberto de los Santos de Jesús, alias El Bukanas, como uno de los principales responsables de la sustracción ilegal de hidrocarburos.

Pese a que en 2020 el gobernador Miguel Barbosa Huerta refirió que su captura estaba próxima a ocurrir, hasta la fecha el sujeto se mantiene prófugo. Sin embargo, sólo se ha logrado el encarcelamiento de múltiples integrantes de su banda.

En 2019, la FGE detuvo a tres secuestradores presuntamente vinculados a El Bukanas, entre ellos su yerno. Según detalló la autoridad, los tres hombres privaron de su libertad a una persona en el municipio de Tehuacán.

Los Villegas

Precursores de El Pelón Villegas, abatido en 2019, siguen Huachicol en Amozoc

Del mismo modo, según obra en las filtraciones de Guacamaya, el grupo delictivo de Los Villegas se encuentra entre los principales liderazgos huachicoleros en los municipios de Amozoc, Coronango, Tepeaca y Tlahuapan.

Esto pese a que en 2019 fue abatido Ángel N, alias El Pelón Villegas, presunto precursor y fundador de dicha agrupación. Según dieron a conocer medios de comunicación locales, a lado del cadáver de este criminal apareció una cartulina con un mensaje presuntamente relacionado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), asumiendo la supuesta autoría del asesinato.

Igualmente en Tepeaca y Tlahuapan la inteligencia militar ubicó a los hombres afines a Roberto N, alías El Colorado, como culpables de que el huachicol siga siendo un ilícito que combatir.

El Mamer, sin conocer su paradero pero señalado como líder huachicolero

Ya en los municipios de Acajete y Acatzingo la Sedena ubicó como precursores del huachicol a las bandas de Jalit N, alias El Mamer, quien se sabe fundó la plaza en Puebla del Cártel Sangre Nueva Zeta; la de El Ferras; así como de Raymundo N, alias El Panes, cuyo paradero se desconoce desde 2019. Este último sujeto –o al menos su banda– fue expuesto como responsable del robo de hidrocarburos en Tecamachalco.

El Toñín, capo del robo de hidrocarburos en el Triángulo Rojo

En el listado también se expuso el nombre de Antonio N, alias El Toñín, un controvertido hombre que se presume a sí mismo como empresario y agricultor, cuya personalidad es considerada por algunos habitantes de Palmar de Bravo como benevolente, pero que también ha sido acusado desde hace varios años de ser uno de los líderes huachicoleros del llamado Triángulo Rojo.

Pese a que las autoridades estatales lo han tenido en la mira por años, sólo han logrado la captura de gente presuntamente allegada a él, tal como sucedió en mayo pasado cuando la FGE detuvo a Celso N, alias El Cochina, quien presuntamente coordinó el asesinato de una persona en Palmarito Tochapan.

Antonio N es hermano de Alejandro N, quien hasta el año pasado despachaba como presidente municipal de Quecholac por el partido Pacto Social de Integración (PSI), pues fue detenido y vinculado a proceso por el presunto ejercicio indebido de funciones, así como actos que se contrapusieron a la seguridad pública en esa demarcación.

Entre 2021 y 2022, Pemex pierde más de 100 mil barriles de gas LP

En otra serie de documentos recabados por Guacamaya, Petróleos Mexicanos (Pemex) documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) durante abril de 2021 hasta abril de 2022, tan sólo en el tramo correspondiente a la entidad poblana, en el ducto Cactus-Guadalajara, perteneciente al Sistema Nacional de Gas LP.

Como parte de la estrategia para reducir el robo de combustible en el estado de Puebla, Pemex elaboró un reporte anual en el cual detalló que durante el periodo antes mencionado hubo una desviación volumétrica de gas LP de hasta 197 barriles diarios.

Si un barril equivale a 159 litros, esto quiere decir que en ese plazo se perdieron cerca de 31 mil 277 litros de gas LP diarios.

Pemex registró que, tan sólo durante mayo de 2022, se ‘extraviaron’ mil 25 barriles de combustible cada día. Foto: Archivo | El Sol de Puebla


En contraste, se recuperaron 176 mil 971 litros de gas, en otras palabras, sólo el dos por ciento del total de combustible ‘desvanecido’ fue readquirido por las autoridades federales, principalmente por elementos de la Guardia Nacional (GN) y del Ejército Mexicano.

Posteriormente, Pemex registró que, tan sólo durante mayo de 2022, se ‘extraviaron’ mil 25 barriles de combustible cada día, es decir, 163 mil 039 litros de gas LP durante ese mes y, en contraste, no se recuperó ninguno.

Por último cabe recordar que, tal como dio a conocer El Sol de Puebla, el robo de gas LP y gasolinas le ha costado a los contribuyentes cerca de 39 millones de pesos durante los primeros tres trimestres del presente año. Por cada una de las 777 tomas clandestinas reportadas durante ese periodo, se ejercieron casi 50 mil pesos por incidente para su atención.

La disputa por el control del huachicol en el estado de Puebla es protagonizada por 15 grupos delictivos, los cuales mantienen sus estructuras vigentes en 18 municipios, principalmente al interior del llamado Triángulo Rojo y en la zona metropolitana de la capital poblana.

En una serie de reportes de inteligencia criminal elaborados por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), en coordinación con autoridades estatales y municipales, y extraídos por el grupo de activistas informáticos Guacamaya, se documentó que entre 2019 y 2020 las autoridades detectaron una decena y media de bandas dedicadas al robo de hidrocarburos en la entidad.

Dicha documentación, que se encuentra en poder de esta casa editorial, refiere que aunque han sido capturados los líderes de, por lo menos, cinco agrupaciones, su vigencia en cuanto al hurto de combustibles se mantiene en diversas demarcaciones poblanas, lo que implica que no todas ellas han sido desmanteladas por completo.

¿Qué bandas delincuenciales pelean por huachicoleo en zona metropolitana de Puebla capital?

Tan sólo en los municipios que abarca la mayor zona metropolitana del estado, Amozoc, Coronango, Huejotzingo, San Martín Texmelucan, San Salvador el Verde y la propia ciudad de Puebla, la Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones como blancos generadores de violencia en cuanto al robo de combustibles.

Tan sólo este territorio alberga 2 millones 114 mil 913 habitantes, es decir, el 32 por ciento de la población total del estado. Según el reporte elaborado por la Sedena y la SSPC, la cobertura criminal en diversos puntos de esta delimitación territorial es peleada por 10 bandas: Los Cuijes, Los Tarzanes, Los Pelones, Los Oaxacos, Los Villegas, Los Othones, Los Marranos y las células delictivas de El Loco Téllez, El Bukanas y La Loba.

La Sedena y la SSPC ubicaron a 10 agrupaciones como blancos generadores de violencia en cuanto al robo de combustibles. Foto: Archivo | El Sol de Puebla


Los Cuijes

La primera de ellas cobró notoriedad en 2017, pues sus integrantes fueron los autores materiales de la masacre ocurrida en el municipio de Huehuetlán el Grande, en la cual fueron asesinadas nueve personas.

De acuerdo con reportes periodísticos, el sanguinario episodio fue producto de una confrontación entre la banda de Los Cuijes y otros grupos dedicados al huachicol en la región central de la entidad poblana.

Según expuso la Fiscalía General del Estado (FGE) en ese entonces, los ataques duraron alrededor de 12 horas y, según determinaron las investigaciones, cuatro personas fueron asesinadas en ese municipio, mientras que otras cinco más fueron liquidadas en otro sitio desconocido y sus cuerpos fueron calcinados y arrojados en un predio de la junta auxiliar de Santo Tomás Chautla, en Puebla capital.

La autoridad ministerial logró la detención de nueve personas pertenecientes a dicha banda, sin embargo, sólo seis de ellas fueron vinculadas a proceso. Inclusive, una de ellas fue un menor de 16 años de edad.

Un año después, a consecuencia a un operativo efectuado por la Secretaría de Marina (Semar) y la Sedena para contrarrestar el robo de hidrocarburos en el estado, se confirmó la muerte a balazos de siete sujetos pertenecientes a la banda de Los Cuijes, entre ellos uno de sus líderes, El Comandante 30. Todos ellos estaban vinculados a la masacre de 2017.

Los Tarzanes

Respecto al segundo grupo ubicado por la inteligencia militar, Los Tarzanes, pese a que su líder, José Benito N, fue detenido por la Procuraduría General de la República (PGR) en 2018 por su responsabilidad en una fuga de gas LP ocurrida en la colonia Villa Frontera, los alcances criminales de sus integrantes se mantienen vigentes todavía.

Aunado al robo de combustibles, según reportes periodísticos, dicha agrupación está ligada al comercio de enervantes, extorsión y asesinatos en las colonias Villa Frontera, Villa Escondida y Jorge Murad Macluf, de la capital poblana.

Pemex documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) durante abril de 2021 hasta abril de 2022. Foto: Archivo | El Sol de Puebla

Los Pelones

La tercera agrupación que domina el huachicol en la capital poblana es la de Los Pelones. Aunque su líder, Gustavo N, fue detenido a sus 26 años de edad, por ser el autor material del robo a un camión cargado de cartón en 2019, y reaprehendido en 2021 por el delito de posesión ilegal de armas, evasión de una detención e intento de soborno a elementos de la Policía Estatal, la actividad criminal de Los Pelones fue considerada como un factor de riesgo a la seguridad pública por la SSPC y la Sedena.

Los Oaxacos

La siguiente organización delictiva presente en la región es la de Los Oaxacos. Su cabecilla, Rubén Darío N, fue detenido en junio de 2019 poco después de que asaltó, junto con miembros de la banda “Los Goyos”, diversos camiones en la Sierra Nororiental de Puebla. Pese a ello, en la actualidad se mantienen imperantes en la venta ilegal de combustibles.

Cabe mencionar que, según la SSPC y la Sedena, las cuatro agrupaciones enlistadas previamente tienen presencia en los municipios de Puebla, Quecholac y San Baltazar Temaxcalac.

Aunado a ellas, la célula de Lidia N, alias La Loba, opera también en la capital del estado, donde, además, se le ha asociado con el robo a ciudadanos. Aunque fue detenida en septiembre pasado, fue dejada en libertad en días siguientes.

Sin embargo, posterior a ello, autoridades ministeriales poblanas catearon diversos inmuebles de la colonia Solidaridad, donde presuntamente vivía junto a su familia, sin embargo, no dieron con su paradero.

Célula de Óscar N, alias El Loco Téllez, mantiene posición en San Martín Texmelucan

Por su parte, las bandas que comparten la plaza de huachicol en los municipios metropolitanos de San Martín Texmelucan y San Salvador El Verde, pero también en San Matías Tlalancaleca y San Miguel Xoxtla, son las de El Loco Téllez, Los Marranos y Los Othones.

Al igual que en casos ya mencionados, el líder del primer grupo, Óscar N, alias El Loco Téllez, fue encarcelado el año pasado luego de que la FGE logró su vinculación a proceso por el delito de homicidio calificado. La sentencia que le imputó un juez estatal fue de 23 años 9 meses, además de una serie de reparaciones económicas a las víctimas que dañó.

Esto ocurrió después de que meses atrás ya había sido aprehendido y después liberado por autoridades del estado de Tlaxcala, por los ilícitos de asesinato y secuestro.

De acuerdo con reportes periodísticos, después de su encarcelamiento, el control del robo de combustibles en San Martín Texmelucan pudo haberse conferido a familiares y amigos de Óscar N. Esto podría justificar la razón por la cual el Ejército Mexicano consideró a su banda como una de las precursoras de este delito en la región metropolitana.

Los Marranos

Respecto a la siguiente banda, la de Los Marranos, lo último que se sabe es que mantienen control sobre diversas autoridades de los territorios que comprenden el llamado Triángulo Rojo. Asimismo, según reportaron medios de comunicación nacionales, este grupo estaría vinculado con el Cártel de Los Beltrán Leyva.

Por su parte, de Los Othones se tiene conocimiento que tiene sus orígenes en el estado de Oaxaca y sus alcances se extienden también hacia Veracruz.

Atañe a Huejotzingo y Esperanza banda de El Bukanas

Ya en el municipio de Huejotzingo, pero también en Esperanza, las autoridades federales posicionaron a Roberto de los Santos de Jesús, alias El Bukanas, como uno de los principales responsables de la sustracción ilegal de hidrocarburos.

Pese a que en 2020 el gobernador Miguel Barbosa Huerta refirió que su captura estaba próxima a ocurrir, hasta la fecha el sujeto se mantiene prófugo. Sin embargo, sólo se ha logrado el encarcelamiento de múltiples integrantes de su banda.

En 2019, la FGE detuvo a tres secuestradores presuntamente vinculados a El Bukanas, entre ellos su yerno. Según detalló la autoridad, los tres hombres privaron de su libertad a una persona en el municipio de Tehuacán.

Los Villegas

Precursores de El Pelón Villegas, abatido en 2019, siguen Huachicol en Amozoc

Del mismo modo, según obra en las filtraciones de Guacamaya, el grupo delictivo de Los Villegas se encuentra entre los principales liderazgos huachicoleros en los municipios de Amozoc, Coronango, Tepeaca y Tlahuapan.

Esto pese a que en 2019 fue abatido Ángel N, alias El Pelón Villegas, presunto precursor y fundador de dicha agrupación. Según dieron a conocer medios de comunicación locales, a lado del cadáver de este criminal apareció una cartulina con un mensaje presuntamente relacionado al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), asumiendo la supuesta autoría del asesinato.

Igualmente en Tepeaca y Tlahuapan la inteligencia militar ubicó a los hombres afines a Roberto N, alías El Colorado, como culpables de que el huachicol siga siendo un ilícito que combatir.

El Mamer, sin conocer su paradero pero señalado como líder huachicolero

Ya en los municipios de Acajete y Acatzingo la Sedena ubicó como precursores del huachicol a las bandas de Jalit N, alias El Mamer, quien se sabe fundó la plaza en Puebla del Cártel Sangre Nueva Zeta; la de El Ferras; así como de Raymundo N, alias El Panes, cuyo paradero se desconoce desde 2019. Este último sujeto –o al menos su banda– fue expuesto como responsable del robo de hidrocarburos en Tecamachalco.

El Toñín, capo del robo de hidrocarburos en el Triángulo Rojo

En el listado también se expuso el nombre de Antonio N, alias El Toñín, un controvertido hombre que se presume a sí mismo como empresario y agricultor, cuya personalidad es considerada por algunos habitantes de Palmar de Bravo como benevolente, pero que también ha sido acusado desde hace varios años de ser uno de los líderes huachicoleros del llamado Triángulo Rojo.

Pese a que las autoridades estatales lo han tenido en la mira por años, sólo han logrado la captura de gente presuntamente allegada a él, tal como sucedió en mayo pasado cuando la FGE detuvo a Celso N, alias El Cochina, quien presuntamente coordinó el asesinato de una persona en Palmarito Tochapan.

Antonio N es hermano de Alejandro N, quien hasta el año pasado despachaba como presidente municipal de Quecholac por el partido Pacto Social de Integración (PSI), pues fue detenido y vinculado a proceso por el presunto ejercicio indebido de funciones, así como actos que se contrapusieron a la seguridad pública en esa demarcación.

Entre 2021 y 2022, Pemex pierde más de 100 mil barriles de gas LP

En otra serie de documentos recabados por Guacamaya, Petróleos Mexicanos (Pemex) documentó pérdidas por hasta 103 mil 596 barriles de gas licuado de petróleo (LP) durante abril de 2021 hasta abril de 2022, tan sólo en el tramo correspondiente a la entidad poblana, en el ducto Cactus-Guadalajara, perteneciente al Sistema Nacional de Gas LP.

Como parte de la estrategia para reducir el robo de combustible en el estado de Puebla, Pemex elaboró un reporte anual en el cual detalló que durante el periodo antes mencionado hubo una desviación volumétrica de gas LP de hasta 197 barriles diarios.

Si un barril equivale a 159 litros, esto quiere decir que en ese plazo se perdieron cerca de 31 mil 277 litros de gas LP diarios.

Pemex registró que, tan sólo durante mayo de 2022, se ‘extraviaron’ mil 25 barriles de combustible cada día. Foto: Archivo | El Sol de Puebla


En contraste, se recuperaron 176 mil 971 litros de gas, en otras palabras, sólo el dos por ciento del total de combustible ‘desvanecido’ fue readquirido por las autoridades federales, principalmente por elementos de la Guardia Nacional (GN) y del Ejército Mexicano.

Posteriormente, Pemex registró que, tan sólo durante mayo de 2022, se ‘extraviaron’ mil 25 barriles de combustible cada día, es decir, 163 mil 039 litros de gas LP durante ese mes y, en contraste, no se recuperó ninguno.

Por último cabe recordar que, tal como dio a conocer El Sol de Puebla, el robo de gas LP y gasolinas le ha costado a los contribuyentes cerca de 39 millones de pesos durante los primeros tres trimestres del presente año. Por cada una de las 777 tomas clandestinas reportadas durante ese periodo, se ejercieron casi 50 mil pesos por incidente para su atención.

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