Una Puebla con más parques, mejores ciudadanos y más bonita, es la que desean los niños para el 2031, cuando la ciudad cumplirá 500 años de haber sido fundada, motivo por el que todos estos deseos fueron guardados en una cápsula del tiempo que se enterró en la 6 Oriente, mejor conocida como la calle de los dulces, para abrirla en esa fecha.
En el marco del 491 aniversario de la fundación de Puebla, el presidente municipal, Eduardo Rivera Pérez, encabezó la colocación de la cápsula del tiempo, en la que se guardaron las cartas que realizaron niños y niñas para exponer cómo es la ciudad en la que esperan vivir dentro de nueve años.
“Hoy tenemos que estar de fiesta, porque nosotros tenemos el privilegio de estar en este cumpleaños de nuestra hermosa ciudad, lo que significa, imagínense, 491 años; su historia, su riqueza, su gastronomía, una ciudad patrimonio y es ciudad patrimonio porque es una ciudad única, emblemática, no solo para los poblanos, sino también para el mundo”, dijo el edil.
Rivera compartió el contenido de dos de las cartas elaboradas por los infantes, ya que en ellas plasmaron su deseo por que la capital tenga a ciudadanos mejor educados, que no tiren basura en las calles y no pinten las paredes, que ayuden a las personas y vivan en una ciudad más bonita, sin ambulantes, con más árboles y parques.
El edil sostuvo que gracias a los fundadores de la ciudad es que hoy podemos disfrutar de una Puebla con la denominación de Patrimonio Cultural de la Humanidad, por lo que reiteró el llamado para mantener vivo su legado.
En el lugar, casi en la esquina con el corredor 5 de Mayo, el edil y los autores del contenido de la cápsula también develaron la escultura “Alas de Puebla”, que la custodiará, simbólicamente, por nueve años.