Durante los meses de contingencia por el Covid-19, el Movimiento Animalista de Puebla (Map), recibió más llamadas de personas que buscaban un nuevo hogar para sus mascotas al no poder sostenerlas económicamente.
La activista Lety Tovar denunció que mientras en otros países las adopciones se incrementaron en los meses de confinamiento gracias a que las personas consideraron tener más tiempo para convivir con ellas, en México sucedió lo opuesto.
En ese sentido, invitó a los ciudadanos a tomar un compromiso sólido con sus mascotas recordando que son seres vivos que merecen una vida y trato digno. Además, exhortó a las autoridades a cumplir con la responsabilidad de velar por el bienestar animal.
En entrevista con El Sol de Puebla, Lety Tovar resaltó que mientras las personas continúen sacando a sus mascotas a la calle, los municipios serán los responsables de recibirlos en centros de control, ya que la ley los obliga a hacerlo.
Sin embargo, las organizaciones civiles en pro de los derechos animales han tomado la responsabilidad de ciudadanos que no lo son, así como de las malas políticas públicas y el incumplimiento de las leyes existentes en la materia.
Agregó que, aunque hace años la política para combatir el problema de mascotas en situación de calle era la recolección y el sacrificio, se han hecho esfuerzos para legislar en favor de todas las especies, pero las condiciones están lejos de ser idóneas.
Lety Tovar apuntó que la única forma en que las acciones en defensa de los animales funcionen es que, de manera paralela, se implementen programas de educación, reacomodar la legislación, así como fortalecer el Instituto de Bienestar Animal.
De esta manera, buscarán que se realicen programas de educación con el fin de concientizar sobre el trato digno y respeto que los animales merecen de nosotros como especie humana.
Insistirán a los legisladores que se aprueben leyes sin lagunas o abiertas a la interpretación, así como para que se fortalezcan los organismos, departamentos e instituto existentes para la defensa de los animales.
La activista del MAP, recalcó que no sólo se busca proteger a perros y gatos, sino a todas las especies que han perdido gran parte de su hábitat por los asentamientos humanos, de forma que las únicas víctimas de la irresponsabilidad del humano y las autoridades son los propios animales.
Por otra parte, mencionó que el Instituto de Bienestar Animal se encargó de ofrecer una capacitación en materia de protección a las autoridades municipales de Zaragoza después que el presidente municipal recomendara a la ciudadanía envenenar perros en situación de calle.
Esto sucedió a pesar de que el entonces candidato había firmado un compromiso con asociaciones animalistas de Puebla para asegurar que velaría por la protección de los mismos.
En ese sentido, la defensora de los animales señaló que el movimiento se ha usado como estandarte político en lugar que exista un interés genuino de proteger a los animales, a lo que señaló que las autoridades están obligadas por ley.
Señaló que se necesita dotar de facultades al Instituto de Bienestar Animal para hacer cumplir la ley y emitir sanciones, pues hasta ahora sólo funciona como un organismo que emite recomendaciones.
De forma que todo el que maltrate a un animal reciba una sanción en consecuencia, y aunque las propuestas están en la mesa, el Congreso del Estado no se ha interesado en legislar en el tema o sentarse con ellos para discutir las reformas adecuadas.
Finalmente, recordó que las propuestas para prohibir las corridas de toros en el estado fueron pausadas tras la urgencia de la pandemia, pero desde el Movimiento Animalista de Puebla no quitarán el dedo del renglón en el tema.
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