Dicen que una de las peores bromas que te juega la vida es estar en el momento incorrecto, y familiares, así como amigos de Liz Domínguez, la joven que fue asesinada en el carnaval de la Rivera Anaya creen que este fue el caso.
Liz acudió a dicho carnaval en compañía de su hermana Itzel sin sabe que el consumo de alcohol entre los asistentes se saldría de control y se registrarían varias riñas; un sujeto las empezó a atacar y puntualmente a Liz le clavó un cuchillo en el pecho. La llevaron al hospital, pero en este lugar falleció.`
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La abuela de Liz, María Gloria Salazar, compartió que sus nietas estaba en el momento equivocado, pues aunque se querían divertir, muy rara vez frecuentaban este tipo de eventos. Liz era una joven bondadosa, alegre, que trabajaba en una perfumería para ayudar económicamente a su familia.
Su sueño era ahorrar dinero para poder estudiar criminología, sin embargo, este anhelo jamás se podrá concretar.
Era una niña que tenía muchos proyectos, quería seguir estudiando. Nunca se metía con nadie, era una niña que solo quería divertirse, nunca pensó todo lo que le iba a pasar dijo la abuela.
Su tía, Isela Domínguez, se quiebra en llanto al recordarla. Era una de sus sobrinas consentidas y eran muy unidas.
La recuerda como una niña muy linda, muy trabajadora, que siempre apremiaba una sonrisa. Su asesinato la tiene rota por dentro, pero el deseo que se haga justicia la mantiene en pie.
La tía, recordó que previo a los carnavales, las autoridades estatales y municipales aseguraron que brindarían seguridad para evitar casos como el de los estudiantes que fueron asesinados en Huejotzingo. No obstante se volvió a registrar abuso de alcohol y, por tanto, muertes.
“Que cancelen los carnavales y eso de los huehues. Si no son capaces de controlarlos y sino son capaces de cuidar a las mujeres que los cancelen. No es justo que le hayan arrebatado la vida a nuestra niña, a nuestro corazón”, expresó Isela.
LA RABIA HIZO QUE SALGAN A LAS CALLES A EXIGIR JUSTICIA
La digna rabia que siente la familia hizo que este 9 de mayo se manifestaran de la Cruz Roja a Casa Aguayo. Ellos argumentan que la carpeta de investigación no avanza y que, hasta el momento, no hay detenidos por el asesinato.
En la movilización se vieron carteles en dónde pedían justicia por Liz, “ni una más”, “me mataron a mi hija”, “nos falta Liz”, “tu muerte no quedará impune”, entre otras consignas.
La madre de Liz, María Salomé, ingresó a Casa Aguayo para hablar con las autoridades del Gobierno de Puebla, pero antes de entrar le pidieron dejar sus carteles en dOnde exigía justicia.
A las 9:30 horas no había salido de la sede del Gobierno de Puebla, más adelante este medio actualizará la información.