Ser mamá primeriza no siempre es fácil y muchas dudas surgen alrededor; principalmente sobre la alimentación del bebé, específicamente de cómo amamantarlo y si está comiendo lo suficiente.
Como primera instancia la mamá debe detectar aquellas señales que indican que él bebé tiene hambre, incluso mucho antes de que empiece a llorar. Si voltea la cabeza de un lado a otro con la boca abierta, agita sus manos o se chupa su puño, es buen momento para empezar a alimentarlo.
¿Cómo amamantar a tu bebé?
Pero ¿cómo amamantarlo? De acuerdo a las recomendaciones que comparte la Secretaría de Salud local, si cargas a tu bebé, podrá pegarse mejor a tu pecho, aunque también puedes hacerlo sentada.
Sólo coloca un cojín sobre tus piernas para que tu bebé quede cerca de tu pecho y no tengas que inclinarte hacia él. Su pancita deberá quedar sobre la tuya y su cabeza alineada con el resto de su cuerpo. Espera a que abra la boca, como si fuera a bostezar, y acércalo rápidamente a tu pecho. Así le ayudarás a prenderse de la aréola y no solo al pezón.
Recuerda que tu bebé sabe cómo prenderse al pecho y mamar. Para retirar a tu bebé del pecho, introduce tu dedo suavemente entre su labio y tu pezón. Así soltará el pezón sin lastimarte. Después de alimentarlo con cada pecho, es importante que pongas a tu bebé en posición vertical o paradito, sobre tu hombro, para que saque el aire.
Otra de las dudas de las mamás es saber ¿cuánto tiempo alimentarlo? Al principio, tu bebé tardará unos 10 a 15 minutos en cada pecho. Espera a que termine un pecho, saca el aire, y continúa con el otro pecho. Si antes de dos horas pide de comer, vuelve a ofrecerle el pecho “a libre demanda” o tantas veces como quiera. Los bebés no se “empachan” de leche materna.
¿Cómo saber si el bebé comió lo suficiente?
Y finalmente ¿cómo saber si el bebé comió lo suficiente? Los médicos señalan que la mamá podrá estar tranquila si el bebé come entre ocho y 12 veces al día, si se queda dormido después de recibir el pecho, si moja cinco o más pañales en 24 horas, y si tiene de dos a cinco evacuaciones al día.
Aunque amamantar al bebé no debería representar complicaciones, algunas circunstancias no siempre permiten una lactancia exitosa y las fórmulas o leche en polvo para bebé son el sustituto ideal.
La dependencia de salud recomienda preparar la fórmula con agua hervida o embotellada y siempre esteriliza biberones y chupones. La leche de vaca y de otros animales no es apropiada para bebés y debe darse solamente después de que el bebé cumpla un año de vida; sin embargo, es importante destacar que será el médico quien sugerirá la mejor fórmula para el bebé.
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