Un monumento elevado que muestra una mujer teniendo a un niño en brazos, sigue recordando al pueblo de San Bernardino Chalchihuapan, comunidad de Ocoyucan, el caso del niño José Luis Tehuatlie, quien el 9 de julio del año 2014, perdió la vida, en el marco de una protesta que ese día tuvo lugar, luego de que un grupo de pobladores pidiera al gobierno del estado restituirles su oficina del Registro Civil y respetar la autonomía de las juntas auxiliares.
Dicha construcción fue colocada un año después de este suceso, en el 2015 y a la fecha, sigue firme a un costado del puente vial nombrado “De la Victoria”, donde fue la movilización que dejó éste saldo y varios habitantes lesionados.
Algunas voces ciudadanas coinciden que el monumento recuerda esa lucha, aun cuando el tiempo ya trascurrió siete años.
“Sigue vivo su recuerdo”, externó Antonia, una vecina de esta comunidad, cuya entrada principal está trazada sobre la carretera federal a Atlixco.
Agregó que la familia del menor sigue a la espera de justicia y en varias ocasiones ha pedido esto ante los medios de comunicación.
En otro punto de esta comunidad, específicamente el zócalo, otro poblador, que evitó dar sus generales, contó que en San Bernardino Chalchihuapan hay dos grandes pendientes sin resolver.
Uno de ellos, es el caso de la muerte del niño en la protesta del 2014 y el segundo, es el conflicto religioso entre católicos.
“Los antorchistas siguen teniendo el control de la Iglesia y los otros católicos siguen sin lugar para sus actos religiosos, y eso ya lleva muchos años, pero no hay solución al problema”, externó, mientras dirigía la mirada hacía el templo de Evangelización o de Guadalupe, que es el tema en conflicto entre los dos grupos de católicos que lo disputan.