Un total de 73 comparsas y más de 30 Marching Bands, desfilaron durante la tarde-noche de este sábado sobre el boulevard 5 de mayo como parte del IX Desfile de Calaveras, que contó con la participación de más de 4 mil contingentes.
En el marco de las actividades del Día de Muertos, el Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMACP) organizó este evento en el que también participaron algunas bandas musicales de San Pedro Cholula, San Juan Ixcaquixtla, Nopalucan de la Granja, Amozoc de Mota, Acajete, Atlixco, San Martín Texmelucan, Tehuacán y Chalchicomula de Sesma.
Además, se unieron algunas comparsas de Reynosa, Tamaulipas; Xalapa, Veracruz, Estado de México, Tecamac y Coatzacoalcos.
En este desfile se unieron diversas instituciones escolares, grupos de ballet, escuelas de poll dance, estilismo y belleza, así como grupos de danza polinesia.
Los primeros grupos en aparecer hicieron alusión al origen prehispánico de la tradición del Día de Muertos y el segundo desfiló bajo la temática de los ritos funerarios.
El tercer bloque hizo referencia al 28 de octubre, fecha en la que se recuerda a las personas que perecieron por algún accidente y el cuarto bloque fue dedicado a las ánimas a las que se les coloca su ofrenda el día 30 de octubre.
Otro grupo hizo su recorrido en memoria de los niños fallecidos quienes recibieron su ofrenda el 1 de noviembre y el siguiente contingente lo hizo en relación al 2 de noviembre de Todos los Santos.
Las temáticas del Cempasúchil y las Leyendas de México también se hicieron presentes en el recorrido. Los últimos contingentes estuvieron dedicados a José Guadalupe Posadas, creador de la Catrina; y los Alebrijes, una artesanía colorida representativa de las tradiciones del país.
El desfile inició su recorrido al filo de las 15:30 horas en el Instituto Pereyra, a la altura de Plaza Dorada y continuó su trayecto sobre el boulevard Cinco de Mayo hasta la altura de Cruz Roja.
Desde temprana hora, familias enteras se dieron cita para ocupar sus lugares y disfrutar del evento que estuvo amenizado por las notas de las marching bands que entonaron melodías propias de la temporada, entre las que destacó el tradicional tema de “La llorona”.
Entre aplausos y porras, los asistentes disfrutaron durante dos horas de los vestuarios y maquillajes que los contingentes utilizaron para convertirse en calaveras andantes como parte de la tradición.