La difusión de un video íntimo de Olimpia Coral, oriunda de Huauchinango, Puebla, la llevó al borde del suicidio, sin embargo, en algún momento de la crisis se detuvo y pensó que era momento de luchar.
En 2013, el video que grabó junto con su pareja fue filtrado, primero a través de WhatsApp, Facebook y después en páginas de pornografia en internet, que la marcaron en ese momento como “la gordibuena de Huauchinango”.
Yo no sabía qué hacer ni cómo se llamaba esta violencia. Llegaron a pedirme sexo con mi perro, llegaron a pedirme videos de mis hermanas, llegaron a pedirme incluso que grabara a mi mamá cuando se estaba bañando y que a cambio de eso bajaban mi video
narró la activista en una entrevista a la revista Emequis
Olimpia tenía 18 años cuando vivió el trago más amargo de su vida, pero con el apoyo de su familia decidió abanderar una causa que estaba en el limbo legal.
Ese día todo lo que había construido se vino abajo, pero nuevamente entre no quedarme callada y no quedarme quieta, dije: no puede ser que no exista un delito, no puede ser. Yo ya estoy viralizada, ya todos me conoce, todos saben cada estría de mi cuerpo, cada lonja de mi estómago, cada parte de mi
Contrario a su situación, la joven apodada “la gordibuena de Huauchinango” sabía que podía trabajar para evitar que su caso se repitiera con otras mujeres.
Así comenzó su lucha, Olimpia fue quien redactó la primera reforma al artículo 183 del Código Penal de Puebla, que fue aprobada en el Congreso del Estado de Puebla el 8 de diciembre de 2018, en el que se reconoce la difusión no consentida de contenido íntimo y penas de hasta seis años a quien lo difunda en la red.
La lucha contra la difusión de imágenes sexuales sin el consentimiento de la persona, ha sido abordado y aprobado en 11 congresos locales y actualmente se discute en la Ciudad de México.
La joven originaria de Huauchinango representa al Frente Nacional por la Sororidad y busca que el Congreso de la Unión aborde el tema y se pueda legislar en la materia para que el marco jurídico se aplique en todo el territorio mexicano.
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Aunque como Olimpia, varias mujeres han vivido la tortuosa exposición de sus cuerpos en internet. Alejandra es una mujer que tiene 33 años de edad y fue víctima de un hombre, que con engaños, grabó su relación sexual para posteriormente subirla en video a un sitio pornográfico, sin su consentimiento.
Aquí su historia