El patronato que tomó el control de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) el pasado 29 de junio argumentó que la orden de suspensión con la que la Fundación Mary Street Jenkins pretende retomar las instalaciones no tiene carácter definitivo.
A través de un comunicado, Rodrigo Gurza Cárdenas, apoderado legal del patronato que designó la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado, señaló que sus representados ya impugnaron la orden de suspensión que les fue concedida a los Jenkins y en breve podría quedar sin efecto.
"La suspensión provisional a la que hace referencia dicho comunicado se encuentra impugnada, por lo que como su nombre lo dice, sus efectos son meramente provisionales y se espera que sean revocados en los próximos días", expuso.
Incluso, dijo que no hay incumplimiento por parte de algún juez en el asunto, sino errores de procedimiento por parte del Poder Judicial, ya que ha notificado a jueces que no intervienen en la atención al litigio.
"El Juzgado Tercero de Distrito en Materia de Amparo Civil de Puebla erróneamente recurrió al juzgado civil 64 de la Ciudad de México para cumplir con dicha suspensión, sin embargo el juez 64 civil tampoco tiene el expediente. El día de hoy el Juzgado Tercero emitió un acuerdo reconociendo esa imposibilidad".
Por último, acusó que son personajes de la familia Jenkins y sus colaboradores los que estarían incurriendo en usurpación de funciones, ya que el patronato a cargo de la UDLAP es el designado por la Junta para el Cuidado de las Instituciones de Asistencia Privada del Estado.