El Gobierno Estatal pedirá al INAH que investigue la remodelación del zócalo de la ciudad para saber el destino de las lajas que se está retirando, así lo informó el mandatario de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, quien confirmó que dicha intervención sigue sin permisos y que la inversión en el Mercado de Amalucan está a punto de caerse.
En conferencia de prensa virtual, el mandatario dijo que con anterioridad la ciudadanía estaba a acostumbrada a ver el trabajo coordinado entre el Gobierno del Estado y el Ayuntamiento de Puebla para hacer “obras espectaculares”. Sin embargo, esta situación no ocurrió con la administración de la edil con licencia Claudia Rivera Vivanco y por ello, las obras que se pretender ejecutar son de orden federal.
En su opinión, las obras que se pretenden hacer en la capital por parte de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) corren peligro y ejemplificó con la del zócalo de la ciudad, pues no tienen los permisos correspondientes para intervenirlo, pero ya se pueden ver a trabajadores retirando las lajas.
Esta situación tiene evidentemente molesto al gobernador, pues comparó la intervención del zócalo con la instalación de la Capilla Sixtina, ya que, en ese entonces, su gobierno fue criticado por dañar las lajas de la catedral.
Por lo anterior, pidió a la titular de la Secretaría de Gobernación, Ana Lucía Hill Mayoral, que dirija un escrito al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tanto a la delegación en Puebla como a su director nacional, Diego Prieto Hernández, para que informen del desino de las lajas que se están levantando en el zócalo y de todo el material que se retire en esta intervención.
“Luego va a pasar como cuando cambian los parques ¿en dónde quedan las bancas?, por ejemplo, en los edificios que recogimos del PRI había bancas de los parques y ahora tenemos que saber en donde van a quedar las lajas. Cuando hicimos el tema de la Capilla Sixtina hicieron un revuelo en la Gerencia del Centro Histórico y la propia presidencia municipal porque no participaban en ese proyecto, porque se estaban afectando unas lajas allá en el atrio de la Catedral (…) Y ahora pregúntense a donde se están llevando las lajas que tienen cientos de años, ¿saben en donde acaban?, en las casas de los machuchones y machuchonas”, detalló.
La otra obra que ejemplificó fue la remodelación del Mercado de Amalucan, pues considera que el Gobierno de la Ciudad no ha podido llegar a un acuerdo con los comerciantes que están en desacuerdo.
“Una está a punto de no llevarse a cabo por falta de diálogo con comerciantes, nosotros estamos ayudando para que eso ocurra, pero no hay voluntad por parte de la autoridad municipal para tener un diálogo y poder ya cerrar todos los problemas y poder iniciar las obras del Mercado de Amalucan y está a punto de caerse esa inversión”, concluyó.