Tras denunciar que han detectado casos de violencia contra niños que son amarrados, abandonados y hasta abusados sexualmente, las representantes de las Estancias Infantiles en Puebla piden al gobierno de la República de Andrés Manuel López Obrador regresar el subsidio para operación de dichas instituciones, además del dialogo con el gobierno interino para rescatar el proyecto.
En conferencia de prensa, Janeth Hernández y Claudia Monserrat Mino Tlapa, señalaron que además de las agresiones a los menores están en riesgo de extinción más de 500 centros debido a que padres de familia no destinan los recursos que reciben de la federación para los menores.
“Se han aumentado los casos de niños agredidos, son amarrados y hasta abusan sexualmente de ellos”, dijo Mino sin dar detalles de los infantes, aunque si estimó que la agresión aumentó un 50 por ciento.
Asimismo, señalaron que, debido a los cambios de operación del programa, en las instituciones se redujo la matrícula en un 30 por ciento. Por esa razón, hicieron un llamado a las maestras y directores de todo el país a crear un frente para rescatar este programa que beneficia a madres de familia trabajadoras.
Mientras, en el ámbito local, solicitaron al gobierno del estado adoptar el programa de las Estancias Infantiles y un diálogo con el mandatario interino Guillermo Pacheco Pulido para informarle de la problemática.
“En primera instancia también estamos solicitando una reunión con el gobernador Guillermo Pacheco Pulido, porque queremos exponer todas las necesidades de los alumnos y de la escuela, se pide destinar recursos extraordinarios. Somos maestros capacitados y maestras profesionistas, tenemos certificaciones de Protección Civil, organizaciones internacionales no dieron cursos para casos de incendios”, dijo.
En compañía del activista y político, Hilario Gallegos, las afectadas señalaron que este tema no se va a politizar, aunque es necesario que los candidatos a la gubernatura hablen en sus propuestas sobre las guarderías, de lo contrario, podría desencadenar en el voto de castigo.
“Es un problema social que se va a desencadenar el movimiento de las guarderías. No es un movimiento político o electoral obviamente, puede haber voto de castigo, pero eso ya corresponderá a cada uno de los padres de familia y de las representantes de estancias infantiles”, concluyó Gallegos.