En los municipios de Teziutlán, Huauchinango y Tehuacán, donde el gobernador Miguel Barbosa busca construir nuevos penales ya hay Centros de Reinserción Social, con excepción de Izúcar de Matamoros, que se vio afectado por el sismo del 19 de septiembre del 2017.
El viernes pasado, el gobernador Miguel Barbosa anunció la construcción de cuatro penales regionales que estarían en los municipios de Teziutlán, Huauchinango, Tehuacán e Izúcar de Matamoros, y uno en la zona metropolitana que tendría una capacidad de hasta 4 mil personas, abrió la posibilidad de que algunos se hagan a través de Asociaciones Público-Privadas (APP).
De acuerdo con información publicada en la Plataforma de Transparencia, los penales de la región Mixteca, ubicados en los municipios de Izúcar de Matamoros, Atlixco y Chiautla de Tapia, se encuentran sin ocupación alguna, ya que resultaron afectados por el sismo de hace dos años y no se han reedificado.
En tanto, los penales de Huauchinango y Teziutlán no son los que tienen mayor ocupación en el estado, pues cuentan con 325 y 138 reos respectivamente. De hecho, los Centros de Reinserción Social (Cereso) con mayor población son el de Puebla con 3 mil 981 ocupantes y el de Tepexi de Rodríguez con 676 personas.
En el caso de Tehuacán, sí es uno de los Centros más poblado, es el tercero a nivel estatal con 556 ocupantes, pero no se encuentra por arriba de su capacidad de acuerdo con las revisiones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
El Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2018 que realizó la CNDH resalta que además de la ocupación, los Ceresos que otorgan peores condiciones a quienes habitan en esos centros, no son los que el gobierno plantea intervenir.
Los Ceresos peor evaluados en garantizar la integridad del personal, la estancia, digna, condiciones de readaptación, así como de gobernabilidad, son los que se encuentran en Tecamachalco, en Acatlán de Osorio y en Zacatlán.
En tanto, los reportes de la CNDH han reiterado que el penal de San Miguel, ubicado en el municipio de Puebla está sobrepoblado y las personas que ahí habitan duplican la capacidad de atención, por lo que es importante atender el hacinamiento que ahí se registra.
