Atender el problema de la violencia contra las mujeres, así como la exclusión y discriminación social son algunos puntos a los que se comprometerá la Benemérita Universidad Autónoma del Estado de Puebla (BUAP) confirmó el rector Alfonso Esparza Ortiz, quien aprovecho para mencionar que la máxima casa de estudios visualizará prácticas y actitudes nocivas entre los estudiantes para poder erradicarlas.
Durante la presentación del Protocolo para la Prevención y Atención de la Discriminación y Violencia de Género, Esparza Ortiz, mencionó que la BUAP establecerá mecanismos dentro de la institución educativa, para garantizar una vida incluyente y libre de violencia para toda la comunidad estudiantil.
Dicho protocolo se elaboró en un ejercicio con la participación de la comunidad universitaria, expertos en temas de género y legislación, así como miembros de la Dirección de Acompañamiento Universitario, del Centro de Estudios de Género de la Facultad de Filosofía y Letras y de la Oficina de la Abogada General.
Por su parte, María del Carmen García Aguilar, secretaria de Investigación y Estudios de Posgrado de la Facultad de Filosofía y Letras, comentó que dicho documento es una iniciativa para atender las necesidades de la comunidad universitaria e impulsar la creación de un instrumento normativo que permita generar un clima libre de discriminación y violencia en la Institución.
“De acuerdo con el Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos, en Puebla se han registrado 70 feminicidios en lo que va del año. En este contexto, no es gratuito que la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres haya emitido la alerta de violencia de género para 18 estados de la República, entre los cuales se encuentra Puebla. La alerta de género apunta su atención hacia 50 municipios de nuestro estado, en algunos de estos la BUAP tiene presencia con campus regionales”, refirió.
Hay que mencionar que el protocolo, presenta de manera puntual la descripción de los actos que puedan ser considerados discriminatorios o violentos y que puedan ser motivos de presentar una queja; de esta forma la Universidad cumplirá con una de las recomendaciones de la alerta de violencia de género, que es que las estrategias también serán dirigida a las instituciones de educación pública.