Con una producción de 2 mil 281 toneladas el año pasado Puebla figuró como el principal productor de amaranto en México, informó la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
El estado se ubicó hasta 2016 como el segundo productor después de Tlaxcala, sin embargo, logró escalar a la primera posición.
Se estima que el amaranto se cultiva en territorio nacional desde hace siete mil años y era parte fundamental de la dieta de sus pobladores antes de la época de La Conquista.
Este cultivo es una especie anual, su periodo de cosecha va de octubre a enero, pero en diciembre se obtiene cerca del 50 por ciento del volumen, destacó la Secretaría.
De acuerdo con información del Atlas Agroalimentario 2018 Tlaxcala se ubica como el segundo productor de amaranto con mil 118 toneladas. Siguieron el Estado de México, con 871; la Ciudad de México, con 140; Oaxaca, con 108; y Morelos, con siete. Aunque Querétaro también figura entre los siete estados productores, el año pasado no reportó cosecha y sí una disminución del 100 por ciento de su producción.
El valor de la producción del amaranto en Puebla se estima en 15 millones 679 mil pesos. Cabe destacar que de 2012 a 2017 el estado disminuyó la cantidad de toneladas reportadas en (-)3.7 por ciento, mientras que la tasa media nacional fue de 3.3 por ciento. El consumo per cápita en el país del cereal mexicano es de 4.0 gramos.
La Sagarpa aseguró que los precios competitivos a los cuales se vende en el mercado externo el tradicional amaranto han generado un creciente ingreso de divisas que en el año 2017 alcanzaron su máximo histórico.
Estados Unidos es el principal destino de las ventas externas de amaranto, con compras que representan el 60 por ciento del volumen total exportado; mientras que en el año 2012 el cereal fue exportado a ocho países, el año pasado fueron 10. “Chile e Italia realizan compras incipientes de amaranto mexicano, países con los que se podría incrementar la venta del cereal”, expuso.
Finalmente, la Secretaría destacó que el amaranto tiene cualidades de adaptación a condiciones adversas que permiten su desarrollo en diferentes circunstancias del suelo, así como de humedad y de temperatura.