Diputados de otras fracciones partidistas como el PRI y Morena se sumaron a la petición de condicionar el aumento al pasaje a una mejora en el servicio que prestan los choferes y concesionarios del transporte público, luego de que el diputado sin partido, Jonathan Collantes Cabañas, planteó frenar el aumento hasta que los transportistas mejoren las condiciones en las que actualmente operan, a raíz de los dos últimos accidentes que provocaron la muerte de tres personas.
La diputada del PRI, Rocío García Olmedo, consideró que antes de subir el precio del pasaje se tiene que analizar la condición económica de los usuarios, las acciones para mejorar la calidad del transporte y que los conductores se sometan a capacitación.
“Yo lo que he considerado que el gobierno del estado tiene que considerar la economía de las familias para la determinación del costo, el estado o acciones que se van a seguir para que el estado en que se encuentra el transporte público sea mejorado y el que los conductores tengan la capacitación adecuada para no estar viendo lo que hemos visto siempre, no solo en los últimos días”.
Por su parte, la diputada de Morena, Estefanía Rodríguez Sandoval, reconoció la necesidad de vigilar “con lupa” las mejoras que puedan hacer los concesionarios al servicio y avaló la propuesta de incrementar sanciones en caso de accidentes para que no queden impunes, aunque aclaró que depende del gobierno del estado el momento en el que autorice el aumento.
“Es necesario generar esta especie de castigos, de sanciones, porque los accidentes que pasaron no tienen que pasar con impunidad, tienen que ser castigadas las personas que son responsables y que tampoco que huyan…Los tiempos del gobierno del estado son suyos, al final son ellos los que emiten este acuerdo o esta decisión, ya sería por parte de ellos, pero sí lo más importante es que se esté vigilante de que se cumplan todos estos requerimientos que son de vital importancia”.
Por su parte, la diputada del PRD, Liliana Luna Aguirre, expuso que el aumento y la mejora en las condiciones tiene que darse de forma simultánea, pues el argumento de los concesionarios es que necesitan recursos para poder invertir en las unidades y medidas de seguridad.
“Es que una cosa lleva a otra, ellos dicen que no pueden garantizar porque no tienen un presupuesto, pero al usuario también se le hace injusto un incremento cuando no tienen las condiciones. Ahí sí está un poco difícil”, explicó.