El eco del grito de “justicia”, “seguridad” y “no somos 5 no somos 10, señor gobernador cuéntanos bien”, hicieron que el mandatario poblano, Miguel Barbosa Huerta, saliera de su oficina en Casa Aguayo para que diera un breve mensaje a miles de jóvenes que protestaban fuera de la sede oficial de su administración.
Una valla metálica separó al gobernador morenista con el contingente de estudiantes, a quienes les dijo que no “le iban a enseñar” sobre los movimientos sociales.
“No necesito contarlos, son muchos, son miles. Yo formé parte de marchas, así es que no me están enseñando a mostrarme la calle, sé lo que representan: el futuro de México”.
Barbosa se hizo acompañar de su sequito de seguridad pública, así como de sus titulares de Gobernación, David Méndez y Melitón Lozano de Educación, para dirigirse en varios puntos del contingente para a través de la barra de metal dar su discurso, en el que pidió a la sociedad su ayuda para trabajar en conjunto para que se obtengan resultados.
Al inicio, Barbosa manoteó con el puño arriba para pedir su palabra, sin embargo, los jóvenes le recriminaron la inseguridad y hasta respondieron: “no lo queremos escuchar, queremos acciones” y “sí no puedes, renuncia”.
En un punto, los jóvenes condenaron su indiferencia ante la inseguridad y mostraban más sus pancartas, una de ellas en las que se leía: “mis sueños no caben en tus urnas”.
“No es indiferencia, cada vez que alguien ha venido a hablar conmigo ha hablado, soy un gobierno cercano a la gente”, dijo Barbosa ante un joven que rompió el llanto por el sistema de justicia y por la impunidad en los casos de violencia.
Otros estudiantes, pidieron que su gobierno abandone el discurso de culpar a otras administraciones y que atienda con acciones, luego de que el mandatario dijo que “los problemas no se resuelven de un día para otro” porque son una herencia.
–Ya dejan de culpar a otros, ya están ustedes, reprochó un alumno.
“No, no, no. Mira, el problema son los policías, la falta de presupuesto y la sociedad, muchas cosas que estamos resolviendo todos los días”, balbuceó Barbosa.
–Vámonos, no resuelve, gritó otro chico desde lejos.
El mandatario se retiró, no sin antes decir que no cuenta con seguridad privada y entre abucheos, así como los gritos de los jóvenes hubo uno que más resaltó: “no, no nos deje, confiamos en usted”.
Después del diálogo, desde la cuenta oficial del gobierno estatal, fue presentado un video editado del encuentro de Miguel Barbosa donde presumió que “salió de las oficinas de Casa Aguayo a recibir a los integrantes de la marcha estudiantil para celebrar la participación activa”. Antes, con los medios de comunicación, señaló que no celebraba a las universidades “manipuladas”.
INGRESAN A MESA DE DIÁLOGO
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