En Puebla existen 34 mil expedientes de demandas laborales sin resolverse, reveló Mario Daza, presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA).
El funcionario estatal especificó que algunas de dichas demandas tienen 10 años de rezago y otras acaban de interponerse. De hecho, dijo que todos los días hay un promedio de 20 recursos interpuestos por los trabajadores poblanos, derivados de distintos temas, como pueden ser despidos injustificados o malos tratos, tanto en los sectores público y privado.
Dijo que uno de los temas que abona al rezago de las demandas es que hubo reducción de personal en la JLCA. Y es que de más de cien empleados, la plantilla laboral se recortó a más de la mitad, lo que significa que hay solo 45 personas que resuelven los juicios (mayormente abogados), lo que hace que las demandas no avancen.
Daza confesó que en 2020 se espera recuperar unos 30 puestos de trabajo en la JLCA para avanzar con la rapidez de los juicios.
Como un dato adicional, se sabe que tan solo de los gobiernos de Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad, quedan 800 demandas laborales pendientes por resolver, de los empleados despedidos del sector público.