Pese a que el gobernador Miguel Barbosa Huerta pidió ayer serenidad a los trabajadores de la educación, adscritos a la Sección 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pues les confirmó que sus sueldos serán homologados con los que recibe el personal docente federal, hicieron caso omiso y tomaron nuevamente las calles de la ciudad de Puebla para exigir la prontitud en la entrega de sus remuneraciones pendientes.
Bajo las consignas “Mientras existan maestros de pie no habrá pueblo de rodillas” y “¡Poblano, escucha! ¡El maestro está en la lucha!”, alrededor de dos mil personas, entre educadores y trabajadores administrativos, se aglutinaron desde las 8 de la mañana de este viernes en las inmediaciones de la China Poblana, en el bulevar 5 de Mayo. El contingente fue encabezado por la Delegación D-II-86.
Una vez reunidos, profesores de diversas regiones de la entidad comenzaron a marchar en punto de las 9 de la mañana hacia Casa Aguayo. La circulación vehicular se detuvo por completo y las personas que abordaban los vehículos de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) se bajaron de las unidades y comenzaron su travesía a pie y de prisa.
Las exigencias del contingente fueron, de nueva cuenta, el pago de sus retribuciones pendientes, pues señalaron que la Secretaría de Educación (SEP) federal ya otorgó a su personal el aumento salarial que solicitó su sindicato, no obstante, en Puebla dicha medida no se ha ejecutado todavía.
Mientras avanzaban por esa vialidad, repetían, con consignas y cantos, que el incremento a su salario fue definido desde enero pasado por la SEP federal, y debió ser efectivo a partir de julio pasado. En ese sentido, defendieron que sus sueldos deben ser ajustados con el aumento aprobado desde entonces y pagados a la brevedad.
Aunado a ello, demandaron que la SEP Puebla, dependencia encabezada por Melitón Lozano Pérez, debe mejorar las condiciones laborales del magisterio, pues sostuvieron que algunas capacitaciones y cursos requeridos para el desempeño de sus labores, tienen que ser solventados por ellos mismos y los gastos muchas veces afectan su economía. Estas mismas peticiones las hicieron los pasados viernes y sábado, igualmente en calles de la capital poblana.
Ya pasadas las 10 de la mañana, la multitud llegó al polígono de San Francisco. No obstante, sus intenciones de llegar a Casa Aguayo se frustraron, pues personal de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal montó una valla para impedirles el acceso.
Por poco más de una hora dirigentes y agremiados discutieron la pertinencia de trasladarse a las afueras del Congreso del Estado, pues pretendían aprovechar la coyuntura del encuentro que el secretario de Gobernación federal, Adán Augusto López Hernández, sostuvo con parlamentarios poblanos y el mismo gobernador. Sin embargo, la falta de consenso y desencuentros entre sindicalizados fue lo que les impidió tomar una decisión.
Fue hasta minutos antes del mediodía, cuando personal de la Secretaría de Gobernación (Segob) se aproximó a los liderazgos de las diversas delegaciones de la Sección 51. El objetivo fue invitarlos a pasar a Casa Aguayo y sostener una reunión con personal de la dependencia, sin embargo, no fueron informados sobre sí el encuentro sería con la titular, Ana Lucía Hill Mayoral, o bien, con el titular de la SEP Puebla, Melitón Lozano Pérez, tal como ellos esperaban.
El encuentro culminó minutos después de las 3 de la tarde. Empero, sus reiteradas peticiones fueron insuficientes para cambiar la postura que el gobernador del estado expuso un día anterior, cuando sostuvo que el erario estatal llevaría a cabo la recaudación del recurso, con el objetivo de cumplir con el compromiso financiero.
No obstante, tras dos rondas de diálogo, la Secretaría de Gobernación (Segob) se comprometió ante los docentes a liquidar sus pagos pendientes antes de que termine el presente año. Según se estableció en una minuta de trabajo, se informará a los docentes el próximo 22 de noviembre qué estado guardan las finanzas públicas y, con base en el análisis financiero del erario estatal, se definirá la fecha de entrega del recurso.
Cabe recordar que el titular del Ejecutivo local externó que no cederá ante presiones de ninguna índole y aseguró que no hará el compromiso de la entrega de ningún recurso, aunque aseguró que sí será entregado una vez que se tenga seguridad sobre liquidez en las finanzas públicas. Por ello, pidió al magisterio paciencia pues dijo que el desembolso repentino de poco más de 200 millones de pesos podría desestabilizar la economía.
Ante esa realidad, los ánimos decayeron y, con ello, algunos amagaron con convocar a un paro general de docentes en el estado hasta que el gobierno defina una fecha concreta para el pago de sus salarios retroactivos, sin embargo, hasta el cierre de esta edición ninguna decisión fue tomada de forma oficial por liderazgos de la Sección 51 del SNTE.