Luego de comprobar que el Covid-19 es real y peligroso, el líder del movimiento antivacunas en Italia, Lorenzo Damiano, se retractó de sus dichos, tras contraer la enfermedad y haber ingresado a un hospital, y se arrepintió por no vacunarse, por lo que ha pedido a la población hacerlo y “seguir la ciencia”.
Según la agencia de noticias Adnkronos, el líder del movimiento conocido como “No Vax”, en Italia, afirmó desde el hospital que su manera de ver las cosas había cambiado y que estaba listo para decirle al mundo lo importante que es cumplir con la inoculación.
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“Claramente mi visión ha cambiado, estoy listo para decirle al mundo lo importante que es seguir colectivamente la ciencia, la que te cura y te salva”, comentó el hombre de 56 años.
De esta manera, la agencia informó que Damiano recibirá el alta hospitalaria este jueves, además de que aseguró que, en cuanto pueda se vacunará.
“Ponte esta vacuna porque te salva la vida”, confirmó Lorenzo, haciendo hincapié en que el inmunizador tiene que “compartirse” en todo el mundo.
Asimismo, agradeció la atención y servicio de los médicos y trabajadores de la salud del hospital Vittorio Veneto, lugar donde ingresó y pasó una semana en cuidados intensivos. “Han sido maravillosos”, concluyó.
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Es importante mencionar que, de acuerdo a los datos del Ministerio de Salud italiano, este miércoles Italia comenzó la jornada con la dosis de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus a los mayores de 18 años, esto debido a que el 84.7 por ciento de los italianos mayores de 12 años ya cuentan con al menos una dosis, mientas que el 84.5 tiene la pauta completa de inoculación.
Italia es uno de los países que más medidas ha tomado para imponer la vacunación a la población, incluso, recientemente la Fiscalía de Bolzano (al norte del país) ha abierto una investigación sobre las llamadas “coronafiestas”, una práctica par contagiarse del virus, con la intención de superar la enfermedad y así, obtener el certificado sanitario.
Estas fiestas privadas, a las que asiste al menos un participante que sea portador del Covid-19, se han puestos de moda en la región de Alto Adige, misma que actualmente posee una de las cifras más altas de contagios en el país y donde, según los medios locales, se tiene muy arraigada la oposición de las vacunas entre la comunidad de lengua alemana.