Después de un mes de haber ocurrido el fallecimiento de un joven de 14 años en un juego mecánico en la ciudad de Orlando, Estados Unidos, los padres del menor decidieron imponer una demanda contra el propietario del juego, Orlando Slingshot, como contra su arrendador ICON Park.
La muerte tuvo un impacto mundial después de que el video en donde el se puede observar como el joven de nombre Tire cae del juego Orlando Free Fall se hizo viral en diversas redes sociales.
El menor se encontraba de visita en el parque junto a la familia de un amigo al ser originario de Missouri y lo que pensó que sería una noche de mucha diversión terminó de manera gráfica. El juego se mantiene cerrado de manera indefinida.
LA DEMANDA DE LOS PADRES
El accidente ocurrió el pasado 25 de marzo, por lo que los padres decidieron hacer oficial la demanda al cumplirse un mes de los hechos. En su demanda se menciona al propietario del juego, fabricante y el propietario del parque de diversiones en la corte estatal de Orlando.
Benjamin Cramp, abogado de la familia, señaló que todos los involucrados fueron negligentes y fallaron a la hora de proporcionar un paseo seguro y un sistema de sujeción adecuado para las personas durante el viaje.
“Los acusados en el caso de Tire demostraron negligencia de muchas maneras. Desde los fabricantes de atracciones y asientos y el instalador hasta los propietarios y operadores”, explicó el abogado Camp en conferencia de prensa. “Los demandados tuvieron más que suficientes oportunidades para promulgar medidas de seguridad como cinturones de seguridad, que podían haber evitado la muerte de Tire”.
También, destacaron que el personal del juego no le informó sobre los riesgos que podía experimentar una persona del tamaño de su hijo durante el viaje. A pesar de tener 14 años, Tire tenía una altura de 1.88 metros y un peso de 172 kilos.
Su demanda es posible que atraiga un reporte oficial presentado la semana pasada por ingenieros externos contratados por el Departamento de Agricultura y Servicios al Consumidor de Florida en donde encontraron las diversas fallas de la atracción.
En su reporte señalaron que los sensores del juego fueron modificados de manera manual para duplicar el tamaño de la apertura para las restricciones en dos asientos. Al hacerlo provocaron que el asiento no estuviera asegurado lo suficiente y que el joven cayera.
A la par, señalaron que hubo otras contribuciones potenciales para el accidente, pero que tenía que evaluarse de manera completa el diseño del juego y sus operaciones.
Otros videos del momento en que ocurrió el accidente muestran como algunos usuarios que estaban en la atracción se quejaron con el personal al no sentir que el juego fuera lo suficientemente seguro.
“La atracción ICON Park Free Fall se inclina hacia adelante y cae cientos de pies a más de 75 mph, y los pasajeros experimentan una fuerza G mayor que la de los astronautas durante el despegue del trasbordador. Incluso entonces, solo tenía un arnés sobre el hombro a pesar de que la mayoría de los juegos de caída libre también tenían un cinturón de seguridad”, publicó el abogado Benjamin Cramp al presentar la demanda.
Dentro de la demanda también se explica que el agregar cinturones de seguridad al juego solo habría tenido un costo de 660 dólares, lo que pudo significar que el joven se mantuviera con vida. El Orlando Free Fall solo contaba con un arnés para los hombres como protección.
Ninguno de los acusados en la demanda presentó una respuesta inmediata.
¿CÓMO OCURRIÓ EL ACCIDENTE?
Todo ocurrió la noche del jueves 25 de marzo cuando Tire visitó ICON Park en el centro de Orlando junto a la familia de un amigo al estar en sus vacaciones de primavera.
El juego Orlando Free Fall se había inaugurado apenas en diciembre del año pasado y, de acuerdo con las imágenes se nota como la protección de Tire termina por fallar para caer desde una gran altura. La atracción tiene una caída libre más alta que la Estatua de la Libertad al llegar a los 131 metros de altura.
Los servicios de emergencia llegaron al parque para atender a Tire y lo trasladaron a un hospital cercano en donde terminó por declararse su muerte. Los testigos presentes señalaron que el sonido del impacto fue sorprendente y otros corrieron al presentir que el joven había fallecido de forma instantánea.
Las autoridades de Florida señalaron que el juego mecánico había tenido una inspección de permiso inicial el 20 de diciembre y que no había presentado problemas. Además, que desde su apertura no había reportes de fallas o alguna queja contra la atracción.