Veronica Wolski, una de las líderes más fuertes del movimiento antivacunas, falleció en un hospital de Chicago después de varias semanas batallando contra el COVID-19. La mujer de 64 años era también partidaria del movimiento QAnon, quienes han creado diversas teorías de conspiración en los Estados Unidos.
Desde hace unos días Wolski se encontraba en cuidados intensivos y era reconocida por burlarse de las diversas medidas contra el coronavirus. Una de las más famosas fue el uso de un antifaz para acudir a lugares sociales, señalando que era su máscara de protección. Presumía también de no haberse vacunado.
Una vocera de la oficina médica de Cook County explicó que la mujer falleció a causa de neumonía como parte de las complicaciones por sufrir del coronavirus y por su hipotiroidismo. No se pudieron dar más detalles sobre su historial clínico debido a las leyes federales de Estados Unidos.
SE MANTIENEN PROTESTAS TRAS FALLECIMIENTO DE VERONICA WOLSKI
Desde que fue internada en el Centro Médico Amita Health Resurrection, los seguidores de Veronica Wolski no han dejado de acosar al hospital. Dentro del movimiento QAnon se ha pedido realizar llamadas constantes de ofensas por no haber dado de alta a Wolski.
Figuras más importantes como Lin Wood, abogado reconocido por apoyar a Donald Trump, incluso señaló que el hospital sería culpable de asesinato si no atendían a Wolski con ivermectina. Tras su muerte, ha pedido se unan a sus movimientos de “desobediencia civil no violenta” como parte de sus protestas.
¿QUÉ ES LA IVERMECTINA?
Respecto al nuevo medicamento que ha sido impulsado por la extrema derecha en los Estados Unidos, la ivermectina, ya ha comenzado a agotarse en varias ciudades de ese país. En redes sociales y por medio de QAnon comenzó a recomendarse su uso en pacientes con coronavirus, pese a que no ha sido aprobado o autorizado.
La ivermectina se utiliza para prevenir los parásitos en los animales, principalmente en caballos. En uso humano solo están aprobadas para tratar la estrongiloidiasis y la oncocercosis intestinal, ambas afecciones causadas por gusanos parásitos.
Si se llega a consumir puede ser un medicamento peligroso y mortal, debido a que las dosis para animales son muy diferentes para los humanos. La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos, ya ha recibido reportes de personas internadas al utilizar este medicamento y ha comenzado a alertar a la población sobre el mismo.
