Luego de que la Fiscalía General del Estado, en un presunto intento de ocultar información en el caso Chema- Paulina Camargo Limón, no entregara archivos digitales a la defensa de José María Sosa Álvarez, la audiencia prevista para este viernes, se aplazó por segunda vez y ahora será hasta la siguiente semana que la FGE pueda comunicarle al acusado, la nueva imputación que pesa sobre él, es decir la de desaparición cometida por particulares.
En tanto, los agentes del Ministerio Público, reiteraron su petición de hacer privada la audiencia por lo que el público en general incluidos los medios de comunicación y la familia del asegurado, tuvieron que abandonar la sala ya que así el juez de control lo concedió a la Fiscalía.
Por su parte, José Luis Sosa Vásquez, padre del joven detenido, acusó que la Fiscalía ahora pretende ligarlo a él y a su familia con un grupo delictivo, solamente como un acto de persecución por lo que incluso temen por su seguridad.
El entrevistado lamentó la decisión de que el público haya tenido que abandonar la sala y que él y su esposa no hayan podido estar apoyando a su hijo. Consideró que lo anterior sólo es una acción para ocultar los errores constantes de la Fiscalía.
Adelantó que seguirán recurriendo a las instancias necesarias para comprobar la inocencia de su hijo.
