Autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) investigan la muerte de un hombre de la tercera edad ocurrida la madrugada de ayer en la colonia Residencial La Paz, que en principio de cuentas se manejó como un suicidio, no obstante, las autoridades descubrieron indicios que al parecer indican que la víctima fue asesinada.
Ayer por la madrugada se reportó el hallazgo del cuerpo sin vida de un varón de la tercera edad, junto a una carta póstuma en la que presuntamente la víctima explicaba a sus familiares los motivos por los que se quitaba la vida.
Sin embargo, peritos y agentes ministeriales investigadores localizaron indicios que los llevó a iniciar las indagatorias como un crimen.
Y es que el varón de 78 años de edad, tenía heridas infligidas por arma blanca, que, según las autoridades no pudo provocarse él mismo, además de que hacían falta artículos de valor en la vivienda del hoy occiso, entre ellos un automóvil.
Alrededor de las 02:00 horas, consanguíneos de la víctima recibieron una llamada por parte de una central de alarmas para indicarles que algo sospechoso había ocurrido dentro de la vivienda de quien fue identificado como Bernardo N, pues el sistema de seguridad se había activado y al tratar de comunicarse con el residente, no lograban establecer contacto con él.
Fue así que los nietos del varón acudieron al domicilio, y con apoyo de policías municipales ingresaron a la vivienda. Tras lo anterior, los efectivos y familiares de Bernardo encontraron sangrando y tirado al pie de las escaleras al septuagenario; a unos metros del cadáver había un papel en el que supuestamente la víctima se despedía y explicaba los motivos que tuvo para quitarse la vida; esto hacía suponer a las autoridades que se trataba de un suicidio.
Asimismo, mientras paramédicos de SUMA confirmaron poco después el deceso del hombre, los uniformados resguardaron la casa a la espera de personal de la FGE.
Al arribar peritos y agentes ministeriales del área especializada en la investigación de homicidios, anotaron que el senil tenía un corte a la altura del brazo izquierdo sobre la muñeca.
Los agentes ministeriales notaron varias inconsistencias en la escena del crimen y en el cadáver, por lo que se presumía sobre un homicidio.
El hoy occiso además presentaba golpes y huellas aparentes de estrangulamiento; con ayuda de los familiares compararon la letra de la supuesta carta póstuma con otros documentos escritos de puño y letra de la víctima, confirmando que eran diferentes.
También se apreciaba que en la casa había huellas que sugieren un robo, ya que no fue encontrado el automóvil de la marca Volkswagen, tipo Jetta, propiedad del septuagenario fallecido.
Los hechos quedaron asentados bajo la carpeta número 37/2020/UIEHOM.
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