La investigación por el asesinato de un joven torturado y ultimado en 2020, al interior del departamento que rentaba en la colonia Jesús González Ortega, se encuentra detenida, incluso el inmueble donde todo ocurrió permanece sellado y sin que este pueda ser liberado o rentado por su propietaria.
Fuentes cercanas al caso dieron a conocer que las indagatorias para ubicar a los responsables se mantienen en el olvido, pues incluso las autoridades no descartan que el asunto tenga que ver con cuestiones de narcomenudeo, aunque el joven trabajaba en una taquería, propiedad de su tío.
Por su parte, vecinos de la zona refirieron bajo el anonimato, que la víctima, Asael N, de 24 años de edad, no era originario de Puebla y aunque contaba con familia política en la ciudad, él sólo rentaba un departamento en la calle Roble de la colonia Jesús González Ortega.
- Puede interesarte: Hombre vuelca su auto para evitar asalto en Puebla
No obstante, tras los hechos ocurridos el 2 de marzo de 2020, a decir de los colonos entrevistados por este medio, el tío de la víctima cerró su taquería y al momento, la familia se mantiene reservada sobre este tema.
De igual manera, la dueña del conjunto de departamentos donde se registró el crimen, no accedió a hablar sobre el asunto, sin embargo, se observó que el departamento donde se suscitaron los hechos permanece con sellos de la Fiscalía General del Estado (FGE), ante lo cual está inhabilitado, representando una afectación monetaria para la dueña del lugar.
Como en su momento se dio a conocer, el joven rentaba con otros amigos, quienes casi no estaban en casa; al momento de encontrarlo sin vida, presentaba múltiples golpes, además de que estaba amordazado y amarrado de las extremidades con alambres, según los datos policiales revelados en ese momento.
Los asesinos también envolvieron a su víctima en plástico para después apoderarse de una pantalla plana y un frigobar, por lo que en ese momento se presumió un robo a casa habitación, no obstante, se mantienen abiertas otras líneas de investigación.
En tanto, vecinos de la zona recuerdan el hecho como algo inusual pues, dicen, se trata de un punto relativamente tranquilo.