Tras hacerse pública la decisión de las autoridades de no continuar con las investigaciones en contra de Epifanio N., por la posesión de una cabeza humana que paseaba por los pasillos de la Central de Abasto Puebla, las autoridades ministeriales desistieron y ayer mismo, cumplimentaron una orden de arresto para llevar a audiencia al detenido, quien se mantenía en el Hospital de Traumatología y Ortopedia del Sector Salud por daño pulmonar.
Aunque se trató de un arresto en flagrancia por parte de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), que incluso, el mismo día de los hechos, el pasado lunes, dejaron al sospechoso en manos del agente del Ministerio Público; fue hasta ayer 27 de agosto, que se ejecutó una orden de aprehensión en contra de Epifanio, lo cual no sería necesario al tratarse de una aprehensión en flagrancia delictiva, tal y como consta en la información en poder de este medio.
Es así como después de que se supiera que, por su estado de salud física ante un probable colapso pulmonar, el acusado había sido liberado, entre la noche de ayer y los primeros minutos de este sábado, las autoridades ordenaron el traslado de Epifanio al Centro de Justicia Penal de Puebla.
Ahí se desarrolló una audiencia exprés en la que el agente del Ministerio Público formuló imputación en contra de Epifanio por el delito de ocultamiento de cadáver, además de que lo vinculó a proceso y concedió plazo de dos meses para investigación complementaria.
Finalmente, se le impuso la medida cautelar de prisión preventiva necesaria, por lo que se ordenó que fuera llevado al penal de San Miguel, donde deberá permanecer hasta que se defina su situación jurídica.