Familiares de Paola, la mujer asesinada por su exesposo la semana pasada en inmediaciones de la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas, piden la pena máxima para el acusado y desean tener la guarda y custodia de los dos menores que quedaron en la orfandad.
“Queremos que le den la pena máxima, una persona así no merece más que un castigo ejemplar, Paola estaba saliendo adelante por sí misma y este hombre se lo impidió al grado de quitarle la vida sin importar dejar en el abandono a sus pequeños hijos…”, señalaron en entrevista con El Sol de Puebla, los deudos.
Junto al altar donde se llevaron a cabo los rosarios del Novenario, compuesto por arreglos florales y sobre una mesa un pequeño cuadro con la fotografía de la víctima, de 36 años, la señora Guadalupe, tía-madre de Paola, pues desde bebé ella la crió al desaparecer su madre biológica, denotó la tristeza que embarga a su familia.
“Queremos enterar a las autoridades que tomen nota de esto, fue una crueldad muy grande y por eso queremos justicia para Paola, queremos que no lo dejen pasar, pedimos todo el peso de la ley contra esta persona, pues jamás volveremos a ver a Paola, sentimos un dolor terrible…”.
Doña Guadalupe aseguró que Paola y Juan, de 33 años, ya tenían tiempo que se habían separado, debido a que él era irresponsable, pues no trabajaba y además era violento, más aún cuando estaba alcoholizado.
PAOLA VEÍA SOLA POR SUS DOS HIJOS
Detalló que Paola y Juan se conocieron porque trabajaban en una mercería, pero después él se salió, se separaron y ella también había conseguido otro trabajo y estaba saliendo adelante por sí misma, sin embargo, él la seguía molestando y ella tenía que soportarlo porque la abuela paterna, le cuidada a sus pequeños hijos.
“Bueno, dizque le cuidada a los niños, pero en realidad solo lo hacían con el niño de 4 años, porque a la bebé de 2 años, no la querían, le daban malos tratos y solamente le daban preferencia al menor; aún así, Paola les tenía que dar dinero como pago por el cuidado de los niños, además de una despensa a la semana”, reveló Guadalupe
Agregó que “el día que mató a Paola, Juan se llevó a su casa a los dos pequeños y después se entregó, por eso no queremos que los niños vivan con su familia, imagínese que el día de mañana se enteren que su padre asesinó a su madre; además de que a la niña la maltratan; por eso queremos que mejor nos los regresen y aquí nosotros le vamos a dar el cuidado como se lo dimos de pequeña a Paola…”.
“Sabemos que ya está en la cárcel, pero queremos que nunca salga, le exigimos a las autoridades justicia y que Juan tenga la pena máxima, porque lo que hizo fue algo imperdonable, algo terrible, el dejar a unos niños sin su madre, en el desamparo, es algo doloroso para sus hijos”, mencionó la entrevistada.
La mujer acotó que por fortuna el día de los hechos, la niña mayor, de 7 años, que no es hija de Juan, se encontraba dormida, pues si se hubiera dado cuenta de lo ocurrido, tal vez la hubieran matado. “Gracias a Dios que no pasó así”, agregó. Asimismo pide la intervención del Gobierno del Estado y el DIF para que puedan tener ellos la guarda y custodia de los pequeños.
Finalmente indicaron que si alguien se solidariza y gusta apoyarlos en los gastos que tuvieron con el sepelio, pueden hacerlo personalmente en la calle Vicente Guerreo número 14 de la citada junta auxiliar.
YA NO VIVÍAN JUNTOS
De acuerdo con fuentes policiales, la ahora occisa de nombre Paola, tenía tres hijos, dos de los cuales procreó con Juan, los dos más pequeños. Ellos estaban separados y se veían de manera esporádica.
El pasado 20 de junio, la expareja llegó a la casa donde Paola estaba pagando renta para vivir con sus hijos, donde ya planeaba pagarle a alguien más para que se los cuidara mientras ella trabajaba. La fuente precisa que Juan estuvo bebiendo y dijo que se iba a quedar a dormir.
Sin embargo, en determinado momento comenzaron a discutir y fue entonces cuando Juan agredió a Paola y la privó de la vida. Cabe destacar que, de acuerdo con los reportes preliminares, la mujer presentaba golpes, tenía manchas de sangre y huellas de estrangulamiento.
Tras cometer el feminicidio, Juan tomó a sus hijos de 4 y 2 años, para luego escapar. Al llegar a su casa, confesó a su madre y hermana el crimen que había cometido, y ellas lo convencieron de que debía entregarse; así es como lo llevaron hasta la Fiscalía General del Estado en donde confesó el feminicidio y se entregó.
FEMINICIDA ES VINCULADO A PROCESO
Por su posible responsabilidad en el delito de feminicidio Juan fue vinculado a proceso y quedó sujeto a la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa por el tiempo que dure el proceso en su contra.
Personal de la Unidad de Investigación Especializada en Feminicidios cumplió orden de aprehensión en contra del hombre para posteriormente formular imputación ante la autoridad judicial.
Al exponer los datos de prueba que recabó, la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género Contra las Mujeres consiguió la vinculación a proceso de Juan N. con la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa y ahora permanece internado en el penal de San Miguel en espera de que avance su proceso.
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