Durante la madrugada se implementó un dispositivo en el penal de San Miguel, para realizar el traslado de 24 internos, considerados de alta peligrosidad, a centros penitenciarios federales.
Esta viene siendo la primera acción por indicaciones del nuevo subsecretario de Centros Penitenciarios del Estado y la recién nombrada directora del penal estatal, a raíz de los cambios por el escabroso caso del bebé Tadeo encontrado en los contenedores de basura.
En días pasados se venía rumoreando un posible intento de motín, sin embargo, se detectó a los instigadores que pretendían ejercer presión e incluso sobornar a las autoridades penitenciarias que de inmediato tomaron cartas en el asunto.
De momento se sabe que los 24 internos fueron sacados de este Cereso y llevados al aeropuerto de Huejotzingo para que vía aérea los trasladaran a los Ceferesos de Morelos, Chiapas y Durango.
Es así como se espera ir restableciendo orden en esta prisión, de la cual su último encargado de despacho y otros 20 empleados se encuentran detenidos por el caso del menor exhumado en la Ciudad de México.
EL HALLAZGO
Cabe recordar que todo comenzó a raíz de que la tarde del pasado 10 de enero, un custodio de los llamados “pepenadores”, al buscar pet entre los contenedores de basura, encontró el cuerpo de un bebé; de inmediato dio aviso a los custodios y estos confirmaron el dicho dando parte a sus superiores y a la Fiscalía General del Estado.
Se trataba de un menor de 3 meses de edad, que murió el 5 de enero en un hospital de la Ciudad de México, después de una cirugía y complicaciones hepáticas; sus padres lo enterraron al día siguiente en un panteón de Iztapalapa, de donde horas después lo robaron y trasladaron hasta la ciudad de Puebla para introducirlo al penal de San Miguel.
UBICAN A PRESUNTOS RESPONSABLES
Tras la presión mediática, después de que la Fiscalía General de la Ciudad de México descartara que el bebé fue robado de un hospital o un anfiteatro, se reveló que en realidad fue exhumado de un panteón y que los padres estaban haciendo la identificación y el reclamo del cuerpo con autoridades de Puebla.
Fue la tarde del sábado 22 de enero, a través de un video, que el fiscal de Puebla, Gilberto Higuera Bernal, reveló parte de la investigación que había realizado la dependencia desde el momento que se tuvo conocimiento del hallazgo del bebé.
Las indagatorias se enfocaron en dos puntos: el primero fue sobre el punto de donde pudo haber sido extraído el menor en territorio poblano. El segundo, detectar quiénes fueron los que lo introdujeron al penal, con qué motivo y el trato que le dieron al bebé.
Dentro de las pesquisas se obtuvo que el menor efectivamente lo exhumaron de un panteón de la Ciudad de México; por lo anterior se tuvo contacto con la familia que finalmente reconoció al bebé y lo reclamó para llevárselo y darle nuevamente sepultura.
En tanto, Higuera Bernal puntualizó que ya tenía identificada a la persona (mujer) que introdujo al bebé al penal.
CAEN LOS PRIMEROS INVOLUCRADOS
Horas después, nuevamente pero a través de sus redes sociales, la Fiscalía General del Estado reveló que ya tenía 19 detenidos por el caso del bebé Tadeo, incluyendo funcionarios y empleados.
A la par, el gobernador Miguel Barbosa Huerta, confirmó que en realidad eran 23 órdenes de aprehensión por el tema, de las cuales 21 ya se habían cumplimentado y faltaban 2.
De ello se supo que fue una mujer la que introdujo al bebé al penal.
A los 21 detenidos ya se les imputaron los delitos de abuso de autoridad o incumplimiento de un deber legal, infracción a la ley y encubrimiento y se encuentran bajo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa en el penal de Tepexi de Rodríguez, a la espera de que en las próximas horas se lleve a cabo su audiencia de vinculación a proceso.
DUDAS EN EL AIRE
Aún no se determina quiénes planearon introducir y con qué objetivo al bebé en el penal; aunque se presume que se debió a un plan orquestado por grupos criminales que buscan desestabilizar al centro penitenciario para tener el control del mismo.
