El cuerpo del hombre que fue hallado embolsado y abandonado a la vera del camino sobre el Anillo Periférico entre el penal de San Miguel y la unidad habitacional de La Guadalupana, el lunes pasado, no tenía cabeza.
Asimismo, la víctima sigue en calidad de desconocida dentro del anfiteatro; se calcula que tendría alrededor de 40 años de edad. El hombre fue brutalmente golpeado y decapitado en vida, según el resultado de la necropsia de rigor, el cual indicó que la causa de muerte fue deceso por decapitación.
Como acá se informó, el lunes pasado alrededor de las 8 de la mañana, automovilistas que circulaban en sentido de Valsequillo a la carretera federal a Tehuacán, se percataron que a la altura del retorno de La Guadalupana, a unos 150 metros del puente conocido como la Herradura que desvía para el Cereso del Estado, había un cadáver embolsado.
Más tarde llegaron elementos de la Guardia Nacional y policías estatales, quienes confirmaron que se trataba de un cuerpo humano.
Poco después personal de la Unidad Especializada en la Investigación de Homicidios, encabezó las diligencias del levantamiento de cadáver y fue llevado al anfiteatro para hacerle la autopsia de ley, sin que se le quitara la bolsa que lo cubría.
Una vez en el anfiteatro, los peritos descubrieron que el cuerpo no tenía cabeza, la cual no fue localizada en el sitio. El cadáver presentaba signos de tortura; le cortaron la cabeza estando vivo.
La línea de investigación que mantienen las autoridades ministeriales es la de un ajuste de cuentas entre integrantes de bandas antagónicas.
