“Las cosas están muy complicadas, no sé ni para qué lo traen, ya sabe cómo es esto”, así es como le contestaron en el Hospital del Niño Poblano (HNP), además de negarle la atención médica al menor de 16 años que está a punto de perder el brazo izquierdo, después de haberse lesionado al caer a una alcantarilla sin tapa en la colonia Humboldt, el pasado 2 de junio.
El padre del adolescente dijo a este medio que después de haber realizado la denuncia pública del caso de su hijo, el 1 de septiembre fueron contactados por una doctora que dijo llamarse Gloria Ramos y la cual hablaba de parte de la “oficina del gobernador” para que el miércoles en punto de las 7 de la mañana acudieran al Hospital del Niño Poblano, para que al adolescente le hicieran una revisión y una radiografía para conocer el estado de lesión en su brazo izquierdo.
Con la esperanza de que su problema fuera atendido y estuviera a tiempo de salvar su brazo, el menor junto con su padre y un amigo de la familia acudieron al referido hospital, donde los hicieron esperar hasta las 4 de la tarde.
Aunque inicialmente les dijeron que el médico ortopedista no llegaría, al final, este se presentó y en cuestión de cinco minutos, desde su vehículo en el estacionamiento del nosocomio, el especialista revisó la radiografía que desde un inicio le sacaron al menor en una Clínica de Salud Digna. Tras checarla, el médico lo único que les dijo fue que él no podía hacerle nada, que no lo iba a operar.
“Esto es una completa burla, el médico llegó todo enojado porque lo sacaron de su casa para que acudiera al hospital, solo para decir que si él fuera el padre, no lo operaría, y al final dijo que para qué lo llevamos, que él no lo iba a operar, para después irse”, contó el padre del adolescente.
Aunque después se acercaron con otra doctora de dicho hospital, ésta, indicó el entrevistado, únicamente les dijo que ella no sabía qué decirles.
“Una doctora nos dijo que tampoco nos podía atender, que las cosas estaban muy complicadas y que ahí en el hospital las cosas estaban limitadas y que pues ya sabíamos cómo era esto”, narró el padre del lesionado, quien se encuentra preocupado y desesperado por ayudar a su hijo.
Como El Sol de Puebla lo dio a conocer en días pasados, el 2 de junio, la víctima de nombre Brandon Josué salió a ver a unos amigos y a su regreso, cerca de las 20 horas, ante la falta de alumbrado público, no vio que sobre la avenida 14 oriente y calle 28 norte, había una alcantarilla sin tapa, por lo que cayó a ésta lesionándose en el brazo izquierdo.
Desde entonces, con la ayuda de sus amigos, el adolescente fue llevado a una sucursal de Salud Digna donde le sacaron una radiografía, en la que se indica que se fracturó el brazo izquierdo en cubito y radio. Aunque desde esa fecha fueron a varios hospitales del sector salud, en todos les negaron la atención médica por no ser derechohabientes y la contingencia sanitaria por Covid-19.
Al aumentar los dolores, Brandon fue llevado a un consultorio de Farmacia Similar donde el médico señaló que el adolescente necesitaba una cirugía de manera urgente, de lo contrario deberían de amputarle el brazo izquierdo, por lo que llevaron un escrito a Casa Aguayo para pedir la ayuda del gobernador, ya que se trata de padre e hijo de escasos recursos, de oficio albañil y que ante la pandemia no han sido contratados, pero que además, hace tres meses perdieron a esposa y madre por cáncer cervicouterino.
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