La sobrepoblación penitenciaria en los Centros de Readaptación Social (Ceresos) de Puebla, provocaron que estos espacios de conviertan en lugares donde se realizan distintas actividades criminales, reconoció el gobernador del estado, Luis Miguel Barbosa Huerta.
"Son 2 mil 140 detenidos, unos han entrado y han salido, pero el aumento de la población en los reclusorios del estado es enorme y entonces la vida dentro de los reculsorios se complica cada vez más y muchos reclusorios ya eran y se están convirtiendo en lugares desde donde se operan dichas actividades criminales".
Así lo manifestó después de que se ventiló un vídeo en redes sociales donde se aprecia a una persona privada de la libertad (ppl) cuando tortura a uno de sus compañeros y lo graba para pedir 50 mil pesos a su familia a cambio de no hacerle daño.
El mandatario reconoció que en este momento se analiza la veracidad del vídeo, pues aceptó que en las primeras revisiones hay opiniones que consideran que es falso.
"En este caso a nosotros nos toca dudar, yo todos los días hago reflexión, recibo información de muchas actividades de seguridad pública. Yo lo que diría de este video es uno, investigarlo y ya lo están haciendo, ya se está analizando y unos opinan que es auténtico y otros que no es auténtico, estamos en ese proceso; y dos, revisar la vida interna de los reclusorios, por eso yo plantee desde el arranque de mi gobierno la construcción de tres reclusorios".
Para mejorar la vida interna en los penales, el mandatario recordó que planteó, desde el inicio de su administración, la necesidad de construir dos nuevos reclusorios para sustituir los penales de Cholula y Tehuacán, así como ampliar el penal de San Miguel, en la capital poblana, para agregar una capacidad de hasta 2 mil 500 nuevos reos.
Explicó que se busca fondear los recursos para hacer estás inversiones y descartó un modelo de Asociación Pública y Privada (APP) para no dejar endeudada a Puebla a las siguientes administraciones.
