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Los semáforos preventivos y los topes reductores de velocidad colocados en la bajada de la Calzada Ignacio Zaragoza con dirección al Centro, no han servido de mucho para evitar el sin fin de accidentes viales que de manera continua se registran en la zona, opinaron vecinos del lugar tras el choque de un tráiler contra una de las bardas del fraccionamiento Villa Los Arcos, la mañana del jueves. Vehículos de carga, autos compactos y unidades de transporte público, fueron captados por este medio, “volándose” sin problema alguno, los topes de bajas dimensiones.
En un recorrido que El Sol de Puebla hizo por el lugar, se observó que a lo largo de la Calzada Ignacio Zaragoza, del mausoleo al Arco Triunfal, con dirección al Bulevar 5 de Mayo, existen tres topes reductores de velocidad: el primero separado del segundo por casi 60 metros, y el segundo del tercero, separado por alrededor de 120 metros. La baja altura de los mencionados topes, para nada, significa un obstáculo para los automovilistas.
Durante la permanencia de este medio en la zona, fue notorio que de 10 conductores que se topan con los reductores, solo tres llegan a moderar su velocidad; el resto utiliza la Calzada Ignacio Zaragoza como autopista, cuando el límite es de 50 kilómetros por hora.
Aunque dichos topes fueron colocados a raíz de la muerte de una joven de 22 años de edad, que mientras esperaba a cruzar, fue aplastada por un camión de volteo que volcó, estos parecen que no han servido de mucho ya que los accidentes en la zona continúan.
La muerte de la joven identificada como Soledad Jazmín, se registró el 13 de enero de 2016, para el mes de junio del mismo año una unidad de la Ruta 70 también volcó, dejando seis personas heridas; cuatro meses después otro accidente de transporte público en esa zona, tuvo saldo de al menos 16 lesionados. El año 2017 no fue la excepción ya que en enero colisionaron un autobús ERCO y un micro de la Ruta JBS, donde la cifra fue de 25 heridos no graves.
El hecho de tránsito más reciente en el lugar, desde luego, es el ocurrido la mañana del jueves pasado, donde el conductor de un tráiler con razón social “Transportes Lima”, por evitar chocar contra otros vehículos detenidos en la luz roja del semáforo, volanteó, impactó contra un poste de energía eléctrica y colisionó contra una de las bardas del fraccionamiento Villa Los Arcos sin que hubiera lesionados.
Vecinos de la colonia Mártires del Trabajo y del fraccionamiento Villa Los Arcos, opinaron que la solución a este problema del cual han sido testigos durante casi diez años, sería colocar otro tipo de topes, que cuenten con mayor altura y obligue a los conductores a moderar su velocidad, prohibir el tránsito de unidades de carga por la calzada, incluso reforzar con señalamientos viales.
“Mi esposa tiene aquí 27 años, a raíz de que hicieron la ampliación de la avenida (Calzada Zaragoza) se han registrado múltiples de accidentes. No se ha hecho nada, la situación es muy grave. En un periodo de diez años, en tres ocasiones se han estrellado y tirado parte de la barda, aunque en ese mismo tiempo, fácil se registraron 20 accidentes vehiculares”, comentó un vecino del citado fraccionamiento.
Otros entrevistados, dijeron que durante el accidente del jueves el saldo pudo haber sido negativo, toda vez que ahí se encuentra una puerta que es utilizada por varios moradores para acceder a la Calzada I. Zaragoza, ya sea por quienes no tiene auto o quienes van a dejar sus hijos a escuelas cercanas. En este sentido, hicieron un llamado a las autoridades correspondientes, ya que consideraron que no hay un real interés por las mismas para solucionar esta problemática.
