Después de enterarse que su esposa le era infiel, un hombre se aventó a un automóvil para matarse y lo logró la mañana de ayer sobre el Bulevar Norte, a la altura del centro comercial Jorge Murad Macluf, mejor conocido como “La Fayuca”.
Tanto la conductora del vehículo involucrado, un VW tipo Jetta de color azul, como otros testigos, aseguraron que el ahora occiso se aventó intencionalmente, por lo que la mujer decidió quedarse en el lugar para aclarar lo ocurrido y resolver su situación legal.
Esa misma versión la reforzó un vendedor de tamales que se encontraba a unos metros de donde ocurrió el atropellamiento. El comerciante detalló que alrededor de las 08:30 horas, llegó el hombre -al que nunca antes había visto- y le pidió un atole.
El varón, de unos 40 años de edad, le platicó que había encontrado a su mujer siéndole infiel y que preferiría quitarse la vida. Ante la declaración, el tamalero le dijo que se quitara esa absurda idea de la cabeza, que mujeres había muchas.
El cliente pagó y caminó unos metros, de pronto, se aventó contra un microbús de la Ruta 52, pero solamente recibió un ligero golpe. Instantes después, esperó que otro vehículo pasara; fue así que el hombre calculó la llegada de otro automóvil, un Jetta azul -que circulaba en el carril de alta-, para arrojarse hacia él.
El suicida estrelló su cabeza contra la parte lateral derecha del carro, a la altura de la salpicadera. El impacto fue tan fuerte, que la unidad perdió el espejo retrovisor.
Al sitio arribaron paramédicos del grupo Relámpagos de Protección Civil Municipal y de Cruz Roja, quienes indicaron que la víctima ya no tenía signos vitales, pues producto del golpe, sufrió un traumatismo craneoencefálico severo.
Un operador de una base de taxis cercana al lugar, reveló que en días pasados habían visto al sujeto tener una conducta extraña con los vehículos que circulaban por el lugar.
Personal de Servicios Periciales, Seguridad Pública y Tránsito Municipal se encargaron de las diligencias del levantamiento de cadáver, quien quedó en calidad de desconocido, por lo que se espera que más adelante sea identificado y reclamado por sus familiares.