En total hermetismo y sin conocerse los resultados de los cateos ni el estatus legal de los detenidos, es como se mantienen las investigaciones relacionadas con la muerte de 76 personas por el consumo de alcohol adulterado en Puebla.
Aunque la dependencia asegura que continúa avanzando en las indagatorias sobre este tema, a dos meses que se dieran a conocer los 23 primeros decesos de este tipo, no se ha revelado qué objetos o líquidos fueron decomisados durante las revisiones a más de cuatro inmuebles ligados a la producción y comercialización de alcohol adulterado en la capital y su zona conurbada.
Además de que se desconoce qué ha ocurrido con las tres personas aseguradas por estos hechos, ignorándose identidad, los cargos que enfrentan y si sus casos fueron o no judicializados y cuál es el estatus legal que guardan.
Si bien se esperaba que la Fiscalía, semanas después de que se destapara la problemática, informara o detallará más sobre sus intervenciones en distintos puntos del estado, lo anterior no ha ocurrido.
El pasado 12 de mayo, se dio a conocer la muerte de 23 personas por la ingesta de alcohol refino en los municipios de Chiconcuautla, enclavado en la Sierra Norte de Puebla, y en Xochitlán Todos Santos, en el centro de la entidad.
Las víctimas presentaron los mismos síntomas como dolor de cabeza, mareos y vómito, motivo por el cual buscaron atención médica, sin embargo, perdieron la vida en cuestión de horas.
Aquel día, se supo que algunos de los fallecidos junto con 38 personas más, participaron en un velorio o en una reunión después de una faena.
A partir de ese momento, autoridades sanitarias, ministeriales e incluso de Protección Civil, tomaron cartas en el asunto para evitar más casos.
Pese a las medidas implementadas por las autoridades, el consumo de alcohol adulterado siguió, de tal manera que el 27 de mayo la cifra se elevó a 100 personas intoxicadas, de las cuales, fallecieron 72, mientras que 14 fueron hospitalizadas y 14 fueron dadas de alta; además de que por este hecho una persona ya había sido detenida.
Lo anterior, según lo dado a conocer en aquel momento por el titular de la Secretaría de Gobernación, David Méndez Márquez, quien para el 12 de junio actualizó las cifras con 76 muertos y 104 intoxicados, de los cuales 13 se encontraban recibiendo atención médica en un hospital y 15 ya habían sido dados de alta.
Tales casos se registraron en los municipios de Huauchinango, Huaquechula, Xochitlán Todos Santos, Zacatlán, Chignahuapan, Tepexi de Rodríguez, Huejotzingo y Puebla.
En cuanto a los cateos, entre el 15 y 19 de mayo, la Fiscalía de Puebla realizó diversas inspecciones en un inmueble de Cuautlancingo, donde un sujeto fue detenido, y en el municipio de Puebla en puntos como San Miguel Canoa, San Francisco Totimehuacán y la colonia San José Las Flores.
En el caso de Cuautlancingo, el inmueble inspeccionado lucía sin ningún tipo de sello por parte de la Fiscalía de Puebla, mientras que la embotelladora Téllez, de San Francisco Totimehuacán, donde no hubo ningún detenido, aún se observa la entrada principal cerrada, con candados y los sellos de la Fiscalía General del Estado de Puebla, según lo captado durante un recorrido hecho por El Sol de Puebla.
Te recomendamos el podcast ⬇️