El ya nombrado “Caníbal de La Resurrección”, que presuntamente asesinó a su esposa, la descuartizó, se comió su cerebro y después llamó a las hijas de la víctima para confesar el atroz crimen, fue vinculado a proceso inicialmente por inhumación clandestina, esta tarde.
Aquí se adelantó que, acuerdo a lo narrado por los mismos familiares y fuentes policiales, que el terrible feminicidio ocurrió desde el jueves de la semana pasada pero fue hasta el pasado sábado que el presunto asesino identificado con el nombre de Álvaro, de 35 años de edad, confesó con sangre fría a la familia lo que había hecho con su pareja Montserrat, de 38 años, dentro de su vivienda en la junta auxiliar de La Resurrección.
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Montserrat conoció a Álvaro y tras casarse el año pasado, se fueron a vivir a La Resurrección, donde desafortunadamente fue asesinada, aún se desconoce la mecánica, y aparentemente por Álvaro, quien sin más llamó por teléfono a uno de los hijos de la víctima y confesó que la había matado.
Cuando los familiares acudieron a la vivienda, al ingresar confirmaron la escena dantesca: el cuerpo desmembrado de la mujer estaba esparcido, incluso algunas partes las había arrojado en un terreno de siembra junto a una barranca y fue en esos momentos que policías municipales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), quienes lo descubrieron en flagrancia, alrededor de la 1 de la madrugada del domingo pasado, cuando llevaba algunos restos humanos dentro de bolsas de plástico, por lo que procedieron a su inmediata detención y puesta a disposición del Ministerio Público.
Al intervenir autoridades ministeriales de la Unidad Especializada en la Investigación de Feminicidios, para hacer las respectivas diligencias del levantamiento de los restos humanos, trascendió que Álvaro se había comido el cerebro de su víctima.
Pobladores de esa comunidad ya apodan a Álvaro “El Caníbal de La Resurrección”, quien tras ser puesto a disposición de un juez de control, este martes fue llevado a audiencia y se le vinculó a proceso inicialmente por el delito de Infracciones a las Leyes y Reglamentos Sobre Inhumaciones y Exhumaciones, concediendo un plazo de 3 meses de plazo como periodo de investigación complementaria, en el cual los familiares exigen que puedan reunir los suficientes elementos para imputarle ya el delito de feminicidio ante el atroz crimen.
Por el momento también se le aplicó al acusado la medida cautelar concedida de prisión preventiva necesaria, quedando encerrado en el penal de San Miguel.
