Cuatro asesinatos y la desaparición de dos primos, tras una entrevista de trabajo que tuvieron en la colonia La Paz y que están ligados a los cuerpos encontrados en el municipio de Izúcar de Matamoros, es el saldo rojo de la semana que acaba de terminar en la capital poblana. Las víctimas mortales fueron hombres, dos de los cuales fueron ultimados a balazos.
Asimismo, dos varones fueron asesinados en colonias colindantes al nororiente de la capital.
El primero de los casos se registró la madrugada del lunes pasado 30 de agosto, cuando fue localizado el cuerpo sin vida de un hombre en calles de la colonia Lagunilla, al oriente de la ciudad.
Más adelante la víctima, asesinada a tiros, fue identificada con el nombre de Álvaro, de 28 años de edad, quien era de oficio taquero y tenía su domicilio en la colonia Francisco Javier Clavijero, cerca de donde lo mataron.
En el lugar se encontró un automóvil de la marca Nissan, tipo Tsuru, de color gris, con manchas hemáticas, por lo que al tener posible relación con el homicidio, fue asegurado para formar parte de las investigaciones que lleva personal de la Fiscalía General del Estado.
Las indagatorias se llevan bajo la carpeta de investigación número FGEP/CDI/FIM/HOMICIDIOS-I/015340/2021.
ENSILLONADO ESE MISMO DIA
Poco después del mediodía de ese lunes, un cuerpo oculto dentro de un sillón, fue hallado por una pepenadora dentro de un contenedor de basura en calles de la unidad habitacional Loma Bella. Fuentes policiacas presumen que se trata de una venganza de narcomenudistas.
Fue una mujer que se identificó como Paulina, quien al ver que del mueble salía sangre y revisar con mayor detalle, descubrió que dentro del sillón estaba escondido el cuerpo de un hombre, por lo que de inmediato avisó a los vecinos y estos a la vez llamaron a la policía, cuyos agentes al llegar, confirmaron el reporte de un cadáver dentro de un sillón.
Al sitio también llegó personal de la Fiscalía General del Estado, el cual realizó las diligencias del levantamiento de cadáver, de quien de acuerdo a vecinos y unos documentos que le encontraron entre sus pertenencias, sería el cuerpo de quién en vida respondía al nombre de José Manuel, de 52 años de edad, un líder social de esa zona, quien había denunciado en los últimos meses los “picaderos” (centros de venta de drogas) de la unidad habitacional de San Bartolo, para que fuerzas policíacas realizaran operativos en combate a este delito.
LO MATAN DE UN MACHETAZO
La mañana del jueves 2 de septiembre, dentro de una casa abandonada, fue hallado un hombre sin vida en inmediaciones de la colonia Álamos Toltepec. Autoridades policíacas presumen que pudo tratarse de una riña entre adictos que se refugian en ese domicilio ubicado en la calle 10 Oriente, esquina con 5 de Mayo.
Esta demarcación es colindante con la colonia Lagunilla, donde la madrugada del lunes pasado fue localizado otro cuerpo con heridas de arma de fuego.
En el caso del jueves, fueron vecinos que al asomarse a la vivienda en obra negra, encontraron el cuerpo de un varón ensangrentado de la cabeza, por lo que llamaron al número de emergencias 9-1-1.
Poco después llegaron policías municipales que confirmaron el reporte; además de acordonar y resguardar el sitio, solicitaron también la presencia de paramédicos, por lo que así más adelante llegaron del Sistema de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA) y al revisar con más detalle al varón, ratificaron que no contaba con signos vitales.
Más adelante llegaron peritos y agentes ministeriales para encargarse de las diligencias del levantamiento de cadáver.
Durante las diligencias anotaron que la víctima tenía alrededor de 20 años de edad, quedó en calidad de desconocida, vestía un pantalón de color negro, suéter gris y tenis blancos.
Además, se documentó que presentaba un golpe con objeto corto-contuso-contundente en la cabeza, al parecer, fue producido con un machete.
ROCIAN DE PLOMO A HERRERO
Finalmente, la noche del viernes 3 de septiembre, a las puertas de su domicilio, un anciano que se dedicaba a la herrería, fue asesinado a balazos por un sujeto que llegó directamente a matarlo en inmediaciones de la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras.
Aunque logró escapar, el asesino fue identificado por testigos, por lo que ya es buscado por las autoridades policíacas y ministeriales.
La víctima respondía en vida al nombre de Ángel, de 71 años de edad, quien era un conocido herrero de la zona; fue asesinado de al menos 12 balazos que le infirió con su arma un sujeto que llegó alrededor de las 21 horas a la casa del septuagenario en calle Ocote de la colonia Lomas de San Jerónimo; le tocó la puerta y apenas le abrió, el sujeto disparó en múltiples ocasiones y después se dio a la fuga con sentido al rastro municipal, es decir, hacia la carretera federal a Tlaxcala.
Testigos llamaon a los cuerpos de emergencias, pero al llegar paramédicos, estos ya no pudieron hacer nada por Ángel, quien presentaba diversos disparos en el pecho y cabeza.
Policías municipales y estatales aseguraron el lugar. Posteriormente la unidad de investigación de homicidios junto con peritos, realizaron el levantamiento del cadáver y la recolección de indicios.
De acuerdo con lo que vecinos informaron a las autoridades ministeriales, un sujeto que portaba sudadera color negro y pantalón de color azul, fue quien mató al septuagenario, además de que fue identificado con el nombre de Roque. Aunque aseguraron que desconocen el motivo de la agresión.
Así es como cerró esta semana sangrienta, con cuatro asesinatos en la ciudad de Puebla, sin que en alguno de los casos haya detenidos al momento.
PRIMOS DESAPARECIDOS
A los crímenes registrados en la semana que acaba de concluir, se suma el caso de dos primos que desaparecieron en la colonia La Paz de esta ciudad, y cuyos cuerpos podrían ser los que fueron decapitados y calcinados en el municipio de Izúcar de Matamoros.
Solo falta el resultado de las pruebas genéticas que se están realizando las autoridades para confirmar o descartar que son o no ellos.
Como este medio lo dio a conocer en su momento, los primos Erick Alejandro y Juan Carlos, de 34 y 37 años de edad, respectivamente, el sábado 28 de agosto, acudieron a unas oficinas en la colonia La Paz para ser contratados como escoltas, bajo la salvedad de que tenían que residir en el municipio de Izúcar de Matamoros.
Ese fue el último día que sus familiares supieron de ellos; sin embargo, lograron establecer mediante el GPS que su última ubicación arrojaba una estación de autobús en Izúcar de Matamoros.
Entre la noche del martes y los primeros minutos del miércoles, pobladores del paraje El Potrero en Izúcar, hallaron dos cuerpos sin cabeza y calcinados a orillas de la carretera federal Izúcar de Matamoros-Huajuapan de León.
Tras tomar conocimiento las autoridades ministeriales y periciales del grupo Matamoros de la Fiscalía General del Estado, se realizó el levantamiento de los cadáveres.
Eso permitió recabar algunos indicios, mismos que apuntan a que los cuerpos podrían corresponder a los desaparecidos.
El viernes personal de la Fiscalía llegó hasta unas oficinas ubicadas en Teziutlán Norte y la calle 3 Poniente, donde se presume que acudieron los primos para ser contratados. Se espera tener más información al respecto en cuanto la Fiscalía General revele los detalles de estas acciones, pues las investigaciones siguen en curso.
