Suman seis los inmuebles cateados por la Fiscalía General del Estado en la ciudad de Puebla y su zona conurbada, ligados a la venta o almacenamiento de alcohol adulterado o indicios de su producción.
Ayer de manera simultánea, agentes estatales de investigación, acompañados por policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Estado, se trasladaron a cuatro domicilios: tres en la zona metropolitana y uno en la junta auxiliar de San Miguel Canoa.
En este último punto, alrededor de 50 agentes investigadores y de la SSP montaron un dispositivo de seguridad, a fin de evitar un conato de bronca en la citada población; los agentes de la FGE se trasladaron a un inmueble de la calle Emiliano Zapata, a una cuadra de la presidencia auxiliar, para hacer las revisiones correspondientes.
Ese punto fue ampliamente asegurado para las diligencias de la Fiscalía, instancia que hasta el momento se ha mantenido hermética en cuanto a los resultados obtenidos en sus intervenciones, sin embargo, en próximos días podría dar a conocer mayor información sobre el tema.
No obstante, cabe recordar que la madrugada del pasado jueves personal de la Agencia Estatal de Investigación acudió a un domicilio ubicado en la zona centro del municipio de Cuautlancingo, donde tras una hora de revisión, aseguraron indicios y detuvieron a una persona que además de ser investigada por la producción o distribución de alcohol adulterado, se le fincarían otros delitos.
Días después, la mañana del pasado domingo, las autoridades catearon una fábrica de vinos ubicada sobre el bulevar Carlos Camacho Espíritu, donde tampoco se reveló lo decomisado.
Todas estas acciones, derivan de las investigaciones que la Fiscalía de Puebla inició tras la muerte de personas por la ingesta de alcohol adulterado en diferentes municipios de Puebla, entre ellos la capital poblana, específicamente en las juntas auxiliares de San Francisco Totimehuacán y San Miguel Canoa.
