Mientras tres hermanos jugaban en su casa en la colonia Independencia, uno de ellos encontró una pistola que resguardaban sus padres, y sin medir las consecuencias le disparó a su consanguíneo que murió poco después en un hospital.
Al momento se tiene confirmado el deceso de quien se llamaba Farid, de 10 años de edad, y quien pereció en el Hospital del Niño Poblano en donde fue ingresado el pasado martes por herida de proyectil de arma de fuego.
Tras el deceso del menor, la madre declaró que sus tres hijos jugaban en su vivienda cuando uno de ellos encontró el arma y la accionó contra el menor, tras escuchar la detonación corrió a auxiliar al niño que después fue llevado al nosocomio donde lamentablemente falleció.
Las investigaciones continúan por parte de la Fiscalía General del Estado sin tener más detalles del otro menor que disparó.