“Mi hijo, sí, era un chico que sufría de déficit de atención y por eso le medicaron Ritalin, pero quienes conocieron a Paolo, saben que era una persona constructiva, amante de la vida”, refutó la madre del joven italomexicano, hallado sin vida en Tlaxcala, luego de haber ingresado al Mercado Unión en Puebla. Ayer, los restos del varón de 27 años de edad, fueron sepultados en el panteón Valle de Los Ángeles ya que no fue posible trasladarlos a Italia.
Este jueves, rodeado de arreglos florales y fotografías que mostraban parte de sus vivencias, es como lució el ataúd de Paolo Prato Paredes, quien fue acompañado por vecinos del lugar donde reside su madre, la señora Martha Paredes, quien en entrevista para El Sol de Puebla, aseguró que su hijo practicaba artes marciales, una persona leal con sus amigos y un hombre de valores.
“Mi hijo era un muchacho que practicaba deporte, fisicoculturismo, artes marciales, era una persona que cuidaba mucho su cuerpo. Sí, fue un chico que tenía déficit de atención, por lo cual consumía Ritalin, que es un medicamento aprobado y que le prescriben a los niños. Él ya había dejado el Ritalin, cayó en depresión y volvió a usarlo, pero él era una persona constructiva”, relató la madre del hoy occiso, la cual refirió que Paolo estudió la carrera de Turismo y para ganarse la vida, trabajaba en cruceros y vendía cosas por internet.
Incluso precisó que el joven de 27 años de edad, venía a Puebla por temporadas, pero aquel 19 de septiembre del año en curso, la acompañó al Mercado Hidalgo, donde al observar algunas cosas del Mercado Unión, decidió acercase, sin creer tardar más de 20 minutos.
“Él vio algunas cosas, me dijo que regresaba en 20 minutos; lo esperé dos horas. Luego decidí regresar a casa, pensé que igual y no me había visto, que tal vez él ya se había ido pero no fue así. Seguí esperando pero ya después de una hora me alarmé porque no llegaba, llamé al 911, a Locatel”, narró la señora Martha, quien consideró que en el supuesto de que su hijo haya ido a comprar “algo” en ese mercado (Unión), no era para haberlo matado con tanta saña.
“Me dijeron que la causa de muerte fue estallamiento de víscera, lo torturaron, no quisieron darme más detalles. Al parecer ellos (PGJ Tlaxcala) llevarán la investigación y bueno, en Atención a Víctimas del Delito, me facilitaron el traslado del cuerpo, el embalsamiento y el féretro”, contó la madre de Paolo, quien destacó que pretendía incinerarlo y llevárselo a Italia pero por dos cosas ya no pudo hacerlo.
“Dijeron que por el tipo de delito, legalmente no puedo destruir el cadáver, y pues entonces lo tengo que enterrar aquí, y para trasladar el cuerpo, tenía que pagar 20 mil euros (alrededor de 440 mil pesos mexicanos), y yo de dónde”, lamentó la entrevistada, quien agregó que ante lo ocurrido, ha recibido llamadas de Italia, de los amigos de Paolo, lamentando la situación pues incluso señaló que el caso ha causado conmoción en Italia, pues también la han llamado de medios de comunicación de aquel país.
Reiteró que aunque no cree que le hagan justicia, ojalá las autoridades esclarezcan los hechos, pero también pide seguridad policial pues hoy teme por su seguridad ya que los responsables incluso ya podrían tener sus datos personales, o hasta las llaves de su domicilio ya que a Paolo le quitaron sus pertenencias.